Charles Rhodes no jugará más con el CAI Zaragoza. El club anunció ayer la rescisión del contrato del pívot norteamericano por las reiteradas faltas de disciplina que el jugador ha cometido en las tres semanas en las que ha pertenecido al equipo y que culminaron con un acto casi de rebeldía el pasado viernes, cuando Rhodes se negó a entrenarse como tenía previsto el equipo desde las 18.00 horas en el Príncipe Felipe. El ala-pívot llegó tarde a más de una sesión preparatoria, tuvo problemas con la autoridad, sus salidas nocturnas fueron constantes y en ningún momento encajó en el equipo.
"La falta de adaptación del jugador, quien llegó el pasado día 5 de abril para completar la recta final de la temporada y reforzar así el juego interior, ha desembocado en que el compromiso que el club siempre ha pedido a sus jugadores no se viera trasladado a la dinámica diaria, llegando incluso a algún acto de indisciplina que no forma parte de la filosofía reclamada por el CAI Zaragoza", explicó el club de manera oficial.
Rhodes ha completado tres semanas en el CAI Zaragoza, disputando cuatro partidos. Su llegada obedeció a la necesidad de buscar un refuerzo interior ante la lesión de Pablo Aguilar, con un problema en el hombro que arrastra desde hace más de dos meses, y su debut fue más que esperanzador. Se estrenó ante el Barcelona en un mal partido general en el que destacaron sus 12 rebotes. En su llegada prometió energía y ayuda sobre todo en las facetas reboteadora y defensiva y lo cumplió en su primer encuentro, pero después su presencia en el equipo se ha ido diluyendo.
Ante el Caja Laboral sumó 6 puntos y un rebote, frente al Fuenlabrada se quedó en 5 puntos y 4 capturas y su última comparecencia con la camiseta del CAI, en Bilbao, se saldó con 3 puntos, 3 rebotes y -3 de valoración. A eso hay que sumar su actitud en los entrenamientos, la impuntualidad y los problemas también fuera de la pista. De esta manera, con las lesiones de los pivots y la salida del norteamericano, el equipo ve mermado su potencial interior para las tres últimas jornadas de Liga. Abós se queda con un único cinco sano, Fontet, ya que tanto Hettsheimeir como Archibald arrastran diferentes problemas, y con el único cuatro con el que comenzó la temporada, Pablo Aguilar.
