El Real Zaragoza sigue en caída libre desde el comienzo del 2017. Ayer cosechó la tercera derrota consecutiva en el nuevo año y no pudo puntuar en campo del UCAM Murcia (1-0), el peor equipo de Segunda División en lo que se lleva de curso como local y que antes del partido partía como colista de la categoría de plata. Además volvió a quedarse sin marcar y eso que en la segunda parte disfrutó de claras oportunidades de gol para haber batido la portería del cuadro murciano, pero no pudo transformar ninguna de ellas. El Zaragoza hizo méritos en este periodo para haber conseguido al menos un empate.

Raúl Agné insistió en el doble pivote del centro del campo con Alberto Zapater y Jesús Valentín, una pareja de contención, y el Real Zaragoza se atascó en la zona medular tras un inicio de encuentro en el que merodeo por el área del UCAM Murcia en un par de jugadas. A partir del primer cuarto de hora el equipo murciano se hizo con el control del juego en la primera parte. Solo tuvo que presionar a Zapater y Valentín para evitar sin muchos problemas que pudieran salir con el balón desde atrás e intentar aprovechar las bandas para atacar ante la poca solvencia de los laterales Isaac y Casado.

Avisó Natalio en el minuto 16 tras un buen servicio de Collantes, que siempre se la lía al Real Zaragoza, pero Xabi Irureta pudo evitar el tanto. Poco después perdonó Natalio con todo a placer para inaugurar el marcador y Basha también probó fortuna desde lejos con un potente disparo. Al final sería Collantes, quien en una buena contra llevada entre Jona y Natalio y con la persimividad de la zaga blanquilla, el que acertaría a batir sin oposición a Irureta en el minuto 25.

El Zaragoza solo tuvo una oportunidad clara para marcar en toda la primera parte, pero Biel Ribas detuvo el lanzamiento de Jordi Xumetra tras un buen pase en profundidad de Cani. El paso por el vestuario le sentó bien al conjunto zaragocista, que ya desde el inicio del segundo periodo dio la impresión de salir con otro talante. Cani retrasó su posición para tener más contacto con el balón y eso fue muy beneficioso para el equipo. Además, quizás por algún toque de atención que pudo darles Agné en el descanso, los jugadores volvieron al campo con un mayor nivel de aplicación tras el descanso del encuentro.

El árbitro no señaló un claro penalti de Hugo Álvarez por empujó a Jordi Xumetra en el minuto 47 y a partir de entonces el Zaragoza se fue acercando con mayor asiduidad a la portería del UCAM Murcia, pero no supo aporovechar ninguna de las claras ocasiones que tuvo para haber logrado al menos un empate en el estadio de La Condomina. Por eso de nada le sirvió tener el control del encuentro.

Ángel, en otro de esos partidos aciagos que tiene de vez en cuando, disfrutó de tres buenas oportunidades, pero no pudo materializar ninguna. Las más claras fueron en los minutos 59 y 84, que no acertó a rematar entre los tres palos cuando tenía todo a favor para batir a Biel Ribas. La presencia de Erik Morán, que sustituyó a Jesús Valentín en el minuto 71, también aportó mayor capacidad al centro del campo del Zaragoza a la hora de jugar el balón.

El UCAM Murcia, viendo que el Real Zaragoza era incapaz de aprovechar algunas de sus ocasiones para cambiar el rumbo del encuentro, también pudo matar el partido en los instantes finales. Tuvo dos oportunidades para hacerlo Collantes, en una de ellas favorecido por un error en una salida de Xabi Irureta, pero no acertó a marcar el segundo gol local. Eran instantes en los que el conjunto zaragocista estaba volcado en busca del empate y jugando con dos carrileros tras la lesión de Isaac Carcelén y la presencia en el campo de Bagnack.