Víctor Muñoz se mostró ayer convencido de que la ruptura de las negociaciones entre los jugadores y el club en el convenio sobre las primas no afectará hoy al rendimiento del Real Zaragoza en el partido contra el Espanyol. "Es cierto que las negociaciones están siendo demasiado largas, pero profesionalmente los jugadores van a demostrar lo que son y lo que tienen dentro. Sobre su profesionalidad no hay ninguna duda por parte de nadie y principalmente por la mía, porque sé cómo son los futbolistas. Nuestro objetivo es ganar al Espanyol", dijo Víctor.

Una de las medidas de presión adoptadas por la plantilla tras ese desencuentro con el club ha sido la de no concentrarse antes de los partidos y por eso hoy acudirán directamente a La Romareda a las tres de la tarde. "Ellos han manifestado con total claridad su postura y ésa ha sido la razón fundamental de que no se vayan a concentrar", afirmó Víctor, quien añadió: "Pero quiero dejar claro que esto no va a influir en absoluto en el plano deportivo, porque además los jugadores tienen una gran disponibilidad para pensar en el rival. En otro países, como Inglaterra, no se concentran".

El preparador aragonés, tras comentar que "es una situación incómoda, aunque en el fútbol siempre se viven situaciones de este tipo", prefirió no posicionarse en este asunto y apostó porque se produzca cuanto antes una solución que pueda satisfacer a ambas partes. "La cuestión no es determinar dónde estás o dónde no estás. Es una negociación abierta y tendrá que cerrarse en uno u otro momento. Los jugadores tienen sus razones y el club esgrime planteamientos económicos para no aceptar sus peticiones. Ahora se ha producido un impás en las conversaciones, pero esperemos que todo se solucione muy pronto. Eso sería lo ideal", explicó Víctor Muñoz.

LA AFICION El técnico del Real Zaragoza no cree que la afición vaya a acudir hoy a La Romareda predispuesta a criticar a los jugadores por la falta de acuerdo en el convenio sobre las primas y además confía plenamente en que el equipo reciba el apoyo necesario del graderío para superar al Espanyol. "Es una negociación entre dos partes y me imagino que lo va a entender todo el mundo, tampoco hay que darle más vueltas. Lo importante es que todo esto no influya en el aspecto deportivo y, de hecho, no va a influir. Necesitamos el apoyo de la gente para ganar a un rival que suele ser muy eficaz", aseguró Víctor.

David Villa, como el resto de los componentes de la plantilla zaragocista, no quiso hacer ayer declaraciones, en su comparecencia en la sala de prensa, sobre la polémica suscitada por el asunto de las primas, "Si me váis a preguntar sobre ese tema, no voy a decir nada, porque hemos decidido no hacerlo, y menos en un sábado, un día antes de un partido. No es lógico hablar hoy (por ayer) de esto. Todo lo que teníamos decir se dijo en el comunicado", comentó el delantero asturiano, quien afirmó que los aficionados actuarán según sea el rendimiento del equipo "La afición nos aplaudirá si ganamos o nos pitará si perdemos, porque ellos, al fin y al cabo, lo que quieren es que su equipo consiga la victoria. Lo mismo que nosotros", puntualizó Villa.

Tampoco Luis Cuartero, capitán del Zaragoza, quiso hacer manifestaciones sobre la ruptura de las negociaciones con el club, aunque afirmó que no se había producido ningún cambio en este asunto. "Nadie del club nos ha vuelto a decir nada sobre este asunto. Todo está igual. Nosotros sólo pensamos ahora en sumar los tres puntos ante el Espanyol", apuntó Cuartero.