El Casademont Zaragoza femenino regresa esta tarde a la competición después de casi dos semanas. Lo hace recibiendo al Kutxabank Araski, un rival directo, (20.00 horas) en el pabellón Príncipe Felipe. El equipo busca dejar atrás definitivamente los puestos de descenso con una victoria en casa.

Sobre el rival, José Carlos Marcos, entrenador ayudante, aseguró que es «un equipo complicado» al que «le benefició mucho el fichaje de Berezhynska, porque no tenían muchas jugadoras interiores y que sea capaz de doblar esa posición y que tenga amenaza desde el tiro de tres les ha ayudado bastante». De hecho, en el partido de ida ya sorprendió al conjunto zaragozano.

Sobre este encuentro de la primera vuelta, en el que el Casademont acabó perdiendo 60-53, el ayudante de Carlos Iglesias aseguró que «no sirve de mucho, ya que hubo el problema del covid». El equipo tuvo que regresar a Zaragoza sin disputar la mitad del encuentro porque una de las jugadoras dio un falso positivo en la prueba que se había hecho con la selección española.

«Fueron partes muy distintas y también en diferente tiempo, por lo que es difícil sacar conclusiones», señaló Marcos. Ahora tendrán que «controlar el partido desde el ataque para ser capaces de hacer un buen balance». «A partir de ahí, tenemos que ser capaces de ayudarnos y tener actividad», concluyó el preparador.