A estas alturas, el Madrid sabe que contar con Gareth Bale para las citas clave de la temporada es un misterio. El jugador galés tampoco se ejercitó ayer lunes debido a su problema en el sóleo, donde también tiene un edema. No jugará hoy ante el Bayern (20.45 horas, Antena 3), por lo que vuelve a dejar coja la BBC, algo que no parece preocupar demasiado por su bajo rendimiento. Ni siquiera Zidane confirma la participación del segundo jugador más caro de la historia (101 millones de euros) para el clásico. Todo apunta a la titularidad de Isco tras su magistral encuentro ante el Sporting. Mientras, Ancelotti sí aseguró que Lewandowski, que se perdió la ida por una lesión en su hombro derecho, estará en el Bernabéu para intentar darle la vuelta al 1-2 de la ida.

«Ha trabajado mucho para volver después de tres meses y tiene alguna molestia. No va a estar ante el Bayern porque no queremos arriesgar. No sé si estará para el clásico. No lo puedo asegurar». Es Zidane hablando de Bale, al que no ve en una semana clave para su equipo. Tampoco da pistas el técnico francés sobre su sustituto. «Lo tengo decidido, pero no lo voy a decir. Isco tiene las mismas posibilidades que los demás», apuntó el entrenador del Madrid, que sostiene que es «una casualidad» que el jugador malagueño solo haya disputado 77 minutos en Champions.

Zidane tiene clara una alineación en la que Ramos y Nacho repetirán en el centro de la defensa por las lesiones de Varane y Pepe. Carvajal vuelve al equipo tras cumplir su partido de sanción en Liga ante el Sporting y Marcelo jugará su encuentro número 400 con el Madrid. Kroos y Modric, que descansaron en Gijón y que están apercibidos junto con Ramos, acompañaran a Casemiro, que disputó los últimos minutos en El Molinón. Arriba, Isco jugará junto a Cristiano y Benzema en un encuentro declarado de alto riesgo y en el que habrá 1.800 policías que estarán muy pendientes de los más de 4.000 seguidores del conjunto alemán.

El partido tiene un nombre propio, el del Xabi Alonso, que regresa al Bernabéu. El jugador de Tolosa, que ha anunciado su retirada a final de temporada, vertió su nostalgia en la sala de prensa del Bernabeu. «Estoy muy emocionado. He tenido una sensación especial. Fue mi estadio cinco temporadas y viví grandes cosas. Le tengo mucho cariño», afirmó Alonso. Sobre la eliminatoria dijo que «jugamos contra el mejor equipo del mundo, pero estamos vivos».

A su lado no estará Javi Martínez, expulsado en el encuentro de ida, lo que acentúa los problemas en defensa, a los que se unen las dudas de Boateng y Hummels, ambos lesionados. Ancelotti es más cauto y habla de una prueba antes del choque. Si finalmente no jugaran, entrarían Kimmich y Alaba, por lo que Bernat pasaría al lateral izquierdo. Segura es la presencia de Lewandowski, que suma siete goles en ocho encuentros de Champions, y al que su equipo echó de menos en el choque de ida.

Ancelotti recordó sus dos años en el Madrid, de los que guarda recuerdos «inolvidables». Sobre el encuentro, está convencido de poder pasar. «Tenemos que hacer un gran partido. Es importante marcar primero, pero no podemos dejar un metro a Ronaldo dentro del área. La ida nos pone en desventaja pero pensamos en hacer un gran partido. Tenemos menos posibilidades que antes del primer partido, pero seguimos teniendo opciones y vamos a jugar nuestras bazas», agregó.