En el seno del Real Zaragoza están convencidos de que en la jugada que Jaime vio la segunda amarilla en campo del Mirandés por entender el colegiado que se había "simulado una caída" le hicieron penalti al jugador manchego y que no debería haber sido amonestado. Por ese motivo, el club aragonés estudiará hoy las imágenes de esa acción y decidirá si presenta o no alegaciones ante el Comité de Competición de la FEF.