El Real Zaragoza pretende, dentro del Expediente de Regulación de Empleo que anunció el 9 de septiembre, reducir de forma drástica los gastos del club y la intención es, como se ha hecho con los servicios médicos, de los que se ha hecho cargo el Grupo Hospitalario Quirón y en los que se ha producido la salida de el doctor Óscar Luis Celada, externalizar otras áreas para lograr ese ahorro, incluso con la posibilidad de que esas empresas externas colaboren mediante publicidad, tal y como ha hecho el Grupo Quirón. El Real Zaragoza, y así se lo ha hecho saber a sus trabajadores, pretende optimizar al máximo el mecanismo de funcionamiento de la entidad y cree que la actual estructura organizativa está anquilosada y en algunos casos con duplicidad de puestos.

De hecho, la negociación con Quirón y la salida de Óscar son el claro ejemplo de otras vías que se quieren abrir para externalizar servicios y que llegue ese ahorro. El club gastaba en torno a los 200.000 euros anuales entre los salarios de Jesús Villanueva y de Óscar, pero ahora no va a tener que pagar al segundo y, al externalizar sus servicios y complementarlos con la publicidad de Quirón en el pantalón, el beneficio es más considerable.

El ERE es extintivo, es decir va a tener despidos --no se ha dado ninguna cifra--, pero desde el club aragonés se ha hecho llegar a los trabajadores que quiere que los despidos que se produzcan sean lo menos traumáticos posible y todo de momento en un clima de cordialidad en esa negociación entre las dos partes. Además, al existir bastantes trabajadores de más de 55 años, las prejubilaciones aparecen como uno de los mecanismos que se pueden dar con más asiduidad para las salidas, mientras que en otros casos se buscará que los empleados del club permanezcan en el mismo a través de subcontratas. Otra forma de ahorro sería la reducción en los emolumentos de los ejecutivos de la entidad.

En el Zaragoza trabajan 264 personas, aunque en muchos casos no lo hacen de forma diaria sino, por ejemplo, en los días de partido o mediante un horario reducido. Además, muchos de los empleados del club llevan bastante tiempo en la entidad o son familia directa de otros trabajadores que en su día también pertenecieron al Zaragoza.

264 TRABAJADORES El ERE afecta a esos 264 empleados, es decir a todos menos a las plantillas del primer y el segundo equipo. En ese ERE también está incluido el personal que trabaja en los equipos inferiores del club y que está contratado por la Fundación 2032. Ese personal también ha delegado la negociación en el comité de empresa de la SAD.

Desde que se anunció el ERE hasta el momento no ha habido avances, aunque desde el club se quiere tener todo resuelto antes de finales de octubre. Los consejeros Fernando Rodrigo y Carlos Iribarren supervisan esa negociación, si bien ésta corre a cargo de los abogados del Zaragoza, encabezados por Ángel Moreno.

Desde el club se ha planteado esta medida como absolutamente necesaria y vital para adaptarse a la nueva realidad económica. "El Zaragoza necesita adelgazar la estructura del club porque la actual no es sostenible. Tenemos muchos apuros y nos vemos obligados tanto por la propia situación del club como por la necesidad de esa estructura actualizada", señaló Christian Lapetra cuando se anunció la medida.