Fuentes del club aragonés reconocieron ayer la tercera vía abierta desde la nueva propiedad para intentar ahora un nuevo traspaso de las acciones del Real Zaragoza a un nuevo grupo de empresarios de la región con solvencia económica contrastada. Es la línea en la que está trabajando de manera personal Javier Lasheras, uno de los empresarios que compró las acciones de Agapito Iglesias. Asimismo, esas mismas fuentes consideran que es una opción complicada, la ven "muy difícil" pero continuarán trabajando en esa línea para agotar todas las opciones posibles y que el club consiga la liquidez necesaria para garantizar su supervivencia.

Desde que Agapito Iglesias traspasó su paquete accionarial a un grupo de empresarios aragoneses --que ha ido cambiando de número y nombres--, estos han buscado otras opciones para revender las acciones. Las dos vías principales con las que la nueva propiedad ha negociado en las últimas fechas han sido el grupo inversor mexicano y la opción que encabezaba el paquistaní Kadir Sheikh. Éste anunció ayer su desvinculación definitiva del intento de compra del club tras una tensa reunión el martes en Zaragoza. El club necesita ocho millones de euros para afrontar los pagos ineludibles de la temporada ya cerrada y se encuentra pendiente de alcanzar un acuerdo con Hacienda que, entre otras cosas, depende de las garantías de pago.