La futura pista de hielo de Jaca estará envuelta por una esfera de cristal, según se observa en el proyecto que ha elaborado el equipo de arquitectos Coll-Barreu y que ha resultado ganador del concurso de ideas que la Fundación Jaca 2007 convocó para construir una nueva instalación helada en la localidad. La singularidad de la propuesta y la solución dada al equipamiento e instalaciones interiores han sido dos de los factores que han motivado que el jurado del concurso se inclinara por la idea de Coll-Barreu por unanimidad.

El veredicto del jurado se conoció ayer, tras una larga jornada en la que cada uno de los cinco equipos preseleccionados defendió su propuesta ante el jurado del concurso. Frente a Coll se encontraban el equipo de arquitectos formado por Hermoso y Heinmannsfel, Enric Soria y Lluis Millet, IDOM y, finalmente, Basilio Tomás. El alcade de Jaca, Enrique Villarroya, definió el proyecto elegido como "magnífico, un hito de futuro".

El equipo ganador, Coll-Barreu Arquitectos, es un estudio dedicado a la investigación, elaboración y construcción de proyectos de arquitectura. En la actualidad trabaja en una sede para el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales en Zaragoza; un sistema de parques públicos en el área metropolitana de Bilbao y un complejo deportivo en el bilbaíno barrio de la Peña. Para este año prevén finalizar el Palacio de Hielo de Bilbao y el nuevo edificio del Departamento de Sanidad.

En cuanto a sus proyectos deportivos, destaca el estadio Allianz Arena de Múnich, una de las sedes de la Copa del Mundo de fútbol del 2006, el estadio de hockey sobre hielo para los Juegos Olímpicos de Turín 2006 o el Oquirrh Park Speed Skating oval para los Juegos de invierno de Salt Lake City.

El proyecto ideado para la pista de hielo de Jaca, una de las instalaciones claves para albergar el Festival Olímpico de la Juventud Europea en febrero del 2007, es un pabellón que será empleado principalmente para el hielo, pero no de modo único. Para ello, y sobre una superficie total de 13.202 metros cuadrados, el equipo Coll-Barreu ha proyectado un pabellón con dos pistas de hielo independientes. La principal tendrá una dimensión de 60x30 metros, y la secundaria, 50x21 metros, pudiendo instalar en su interior hasta tres pistas de curling.

CAPACIDAD MODELABLE El graderío será regulable al evento que se vaya a celebrar. Así, se prevé un aforo mínimo de 1.891 personas y un máximo de 3.500, pudiendo ampliar la capacidad hasta las 6.700 personas en conciertos y espectáculos similares. Aunque el elemento más llamativo del proyectyo de CollBarreu es la esfera opaca y de vidrio que envolverá totalmente el nuevo pabellón. Una esfera que, según Juan Coll, responsable del estudio ganador, es "un reflejo del medio en el que se proyecta el pabellón, de la relación que tienen los deportes de invierno con la naturaleza y de la nueva orientación a las personas de los edificios públicos".

El proyecto presentado, tal y como se exigía en las bases del concurso, propone algunas soluciones urbanísticas en la zona adyacente al nuevo pabellón, que es la superficie del actual. Sin embargo, estas intervenciones se harán con un presupuesto aparte de los 10 millones de euros que se han destinado el nuevo pabellón, y en una segunda fase, después del Festival Olímpico.