El enfrentamiento ante el colista deparó un vistoso encuentro en el pabellón Príncipe Felipe, que vio el triunfo más contundente de la temporada del CAI Aragón. Los doce goles de diferencia final en el marcador dejan claro la diferencia entre el aspirante al quinto puesto y un equipo que ya ha consumado el descenso. Pero el encuentro comenzó con nervios en los locales, por la presión que supone tener que ganar a un rival que todo el mundo considera inferior, unos nervios que desaparecieron en seguida, en cuanto el CAI Aragón logró distanciarse en el marcador.

El Tolimar Tres de Mayo salió dispuesto a dar guerra, a buscar un triunfo o, cuando menos, a caer con honor. Peleó y puso las cosas difíciles al equipo de Fernando Bolea, hasta que la diferencia en el tanteo era ya insalvable. Con la victoria asegurada, el CAI disfrutó del balonmano, consiguió goles variados, desde todas las posiciones, desperdició buenas oportunidades e hizo divertirse también a la grada.