El coronavirus también ha afectado a la celebración de los Juegos del AD Cierzo. El evento se iba a celebrar los próximos 24, 25 y 26 de abril. Pese a que la organización valoró su traslado al mes de octubre, la coincidencia con el inicio de la temporada propició finalmente que la edición inicialmente programada para el 2020 se aplazase al 2021. El evento deportivo LGTBI+ con más solera de Zaragoza y que el año pasado reunió a más de 400 deportistas, tendrá que parar cuando ya estaba apalabrada la presencia de equipos internacionales.

El voleibol sigue siendo el gran abanderado del AD Cierzo, como lo fue del Elaios, primera entidad LGBTI+ del deporte zaragozano. Cuatro equipos, tres masculinos y uno femenino, conforman una estructura sólida que consiguió el Campeonato de Aragón la temporada pasada y que sueña con alcanzar la 1ª División, tercera categoría nacional. «Este curso íbamos segundos y con opciones. El año pasado jugamos la fase de ascenso. Siempre nos cruzamos con catalanes y baleares, lo que lo hace difícil, pero tenemos la intención de ascender», indica David Lechón, fundador de la AD Cierzo, socio de honor de Elaios y, a la par, también presidente de la Federación de Voleibol de Aragón.

Más allá de su actividad deportiva, la asociación pretende ser un punto de encuentro del colectivo y un motor del cambio social en la reivindicación de la igualdad de derechos del colectivo LGTBI+. La AD Cierzo forma parte del Consejo Sectorial de Igualdad del Ayuntamiento de Zaragoza, donde coordinan el grupo de trabajo de la Diversidad Sexual y Afectiva, además de participar en la Plataforma 28J, que organiza las acciones el día del ‘Orgullo’.

Por una ley / David Lechón fue parte activa de la redacción del octavo capítulo, referente al deporte, de la ley autonómica por la igualdad y protección integral contra la discriminación por razón de orientación sexual, expresión e identidad de género. En esta norma, aprobada a finales del 2018, se desarrolla una estrategia para facilitar el acceso al colectivo LGTBI+ al deporte, promover la sensibilización y formación hacia la diversidad afectiva dentro de las entidades deportivas, generar protocolos de actuación ante situaciones de homofobia, acogida y protección de personas transexuales e intersexuales dentro del ámbito deportivo y actuaciones concretas para construir un espacio de igualdad en el deporte base, federativo y profesional.

Entre las medidas se indica la necesidad de aceptar a los menores transexuales según su género sentido, sin necesidad de presentar un documento acreditativo. En Aragón sólo se ha dado un caso, precisamente en el voleibol, pero este mes en Cataluña se había conseguido que una niña de ocho años pudiera competir en la modalidad de natación después del bloqueo de cinco meses de la federación regional.

Las tareas del AD Cierzo se encaminan además hacia la formación, participando sus entrenadores en el desarrollo de los equipos de base de La Muela, Santa Isabel o el barrio de La Bombarda. «Hay chicos de estos equipos que ya han debutado con el sénior de nuestro club», confirma David Lechón. Además se han desarrollado charlas de sensibilización, como la que dio el año pasado el judoca Marc Fortuny junto con David Guerrero, presidente de la asociación Deporte y Diversidad, y se ha impulsado la colaboración con la ONG Accem para incorporar a sus equipos a inmigrantes que han sufrido discriminación sexual en sus países de origen.