La cara de Cristian Álvarez expresaba la frustración y la incredulidad de la decadente situación que está experimentando el Real Zaragoza. La derrota ante el Cádiz dejó patente que el equipo no sabe cómo solucionar esta difícil papeleta. Al término del encuentro, el guardameta argentino explicó que es «un momento muy complicado para nosotros. Estamos tocados anímicamente porque llevamos muchos partidos sin conseguir la victoria. Estamos abajo y ahora tenemos que hacer lo imposible por salir».

En este sentido, Alberto Benito recalcó que el vestuario está «jodido». «Cuando nos meten gol vemos los fantasmas de la derrota, pero somos profesionales y tenemos la obligación de sacar esto adelante. Tenemos que limpiar la cabeza, descansar y solo cabe ganar sí o sí al Córdoba». Una vez más, La Romareda juzgó con pitos el paupérrimo juego que caracteriza a los blanquillos esta temporada. «No tenemos que estar nerviosos. Estoy seguro de que la gente nos apoyará como siempre. Hay que estar tranquilos porque, cuando marquemos, se vendrán arriba», concluyó Benito.