Nada ni nadie puede impedir que el sentimiento zaragocista aflore. Lo hace en los buenos momentos y, sobre todo, en los no tan buenos, cuando tu equipo del alma más lo necesita. En la peor temporada del Real Zaragoza desde tiempos inmemoriales, así lo entendieron «un grupo de amigos», como ellos mismos explican, que se juntaron una tarde y acabaron creando una peña. El 3 de diciembre se inauguró la Peña Zaragocista Actur Verderol y, en estos seis escasos meses de vida, ya son 74 sus integrantes.
Sus miembros no ocultan que la campaña no es la esperada, «pero salvarnos lo vamos a hacer seguro, incluso aunque se pierdan todos los partidos que quedan», afirma Fermín Miguel, su tesorero. «La suerte que tenemos es que los demás equipos son muy malos», apostilla Antonio Gasca, secretario de la peña.
Gran parte de los problemas de esta temporada vienen de lejos y, en concreto, desde los fichajes de verano y de invierno. Para Gasca, «Samaras está reventado, José Enrique es lateral pero tiene que jugar de central porque no puede subir la banda y Cani solo aguanta una parte. Juliá no fichó bien». Por su parte, José Luis Gordo cree que «a Milla se le tendría que haber dado más continuidad, igual que a Agné no se le podían dar todos los partidos que tuvo. Si a Luis Milla no le hubieran echado estaríamos mucho más arriba de lo que estamos».
Juventud y hambre
La fórmula de fichajes de esta campaña no ha funcionado y, por ello, para el nuevo proyecto, José Luis aboga por «hacer limpieza de lo que hay y apostar por gente joven y con ganas de jugar». «No hay que fichar estrellitas de Primera, sino futbolistas que vayan para arriba», añade Gasca y Fermín pone por ejemplo a Borja Bastón como tipo de fichaje que haría falta, aunque José Luis también opina que «hay que traer a alguno de renombre».
De todos modos, por muy mal que vaya todo, como dice Gasca, «aunque tardaremos, sé que volveremos».
