Stephen Curry jugará cinco años más con los Warriors por 201 millones de dólares (175 millones de euros), el contrato más lucrativo de las cuatro Ligas profesionales de Estados Unidos. El base de 29 años es la primera estrella de la NBA que firmará un contrato superior a los 200 millones de dólares, una vez abierta ayer la ventana para la firma de agentes libres, lo que le supondrá pasar de un contrato de 18 millones en la temporada recién finalizada a cerca de 40.

El acuerdo de los Warriors, flamantes campeones de la NBA, con el dos veces MVP (2015 y 2016) fue el epicentro de una intensa jornada en el mercado de fichajes, en la que se vio envuelto Ricky Rubio, traspasado a los Utah Jazz como relevo de George Hill, después de seis temporadas en Minnesota. A cambio del base de El Masnou, de 26 años, los Timberwolves reciben una primera ronda del draft 2018. Nada más abrirse el mercado de la agencia libre, se confirmó que será Jeff Teague (Atlanta Hawks) quien ocupará la plaza de Ricky en el equipo de Tom Thibodeau.

El contrato de Curry fue el banderazo de salida de una jornada en la que también se supo que el alero Blake Griffin firmará un nuevo y multimillonario acuerdo de cinco años con los Clippers. Griffin renovó por 173 millones de dólares (151 millones de euros), después de desechar las reuniones programadas con los Phoenix Suns y los Denver Nuggets.

La NBA ahora recibe 2.700 millones de dólares al año por derechos de TV, frente a los 930 millones anteriores. El techo salarial es de 99,093 millones por equipo.