La carrera de todo atleta, sea cual sea su especialidad, suele ser de fondo. Un camino más o menos largo en función del talento y del trabajo de cada uno. De ambas cosas anda sobrado David Cartiel, que sigue quemando etapas en su crecimiento con excelentes resultados. El último, el récord de España sub-18 y mejor marca mundial del año en la categoría en 1.500 con 3.51.24. «Es una barbaridad. Empiezas a comparar y qué hacía a su edad Fermín Cacho, González, Abascal… pues los ha mejorado a todos. Que no significa nada, solo que estamos ahí. Hay que seguir con humildad tratando de alcanzar las metas que el potencial de David le puede permitir», señala Felipe Castañer, entrenador de Cartiel desde los 6 años en el Atletismo Zaragoza.

Castañer sospechaba que su pupilo podía estar en ese tiempo, pero no suele decírselo hasta que lo consigue. Cartiel, de 16 años, no se esperaba semejante resultado. «Como hace dos o tres semanas competí en un 1.500 sí que teníamos una idea de algo así, pero cuando hice esa marca no me imaginaba tanto. Me veía entrenando bien pero no me esperaba tanto. Mi entrenador sí me decía que podía hacer algo así pero yo no me lo imaginaba», explica el joven atleta. Sus sensaciones fueron buenas. «En la carrera me notaba muy bien pero hasta que no llegas a los últimos metros no sabes si vas a poder o no», señala con modestia. Cree que puede arañar un poco más de tiempo al crono, «si sale otra carrera así igual sí que se puede mejorar algo», pero su objetivo no son los récords. Su próxima meta es el Campeonato de España y el gran objetivo del año, el Europeo en agosto.

Castañer está encantado con él. «Físicamente es un atleta longilíneo, de un correr fácil, bonito, de los que gusta ver correr. Además es un atleta muy disciplinado, igual que con los estudios, una persona tímida, no hace ostentación de nada, súper discreto, le cuesta mostrar emociones, humilde y trabajador. Posee las aptitudes necesarias y la actitud necesaria para afrontar un entrenamiento a largo plazo», relata el técnico.

Pero los récords, los éxitos que está cosechando, no le hacen perder la perspectiva. Primero, porque son resultado de un largo trabajo de años y años en la escuela del club y, segundo, porque no son sino pasos, importantes, llamativos, pero pasos hacia las grandes metas. Allá a lo lejos, el sueño de los Juegos Olímpicos. Antes, los Nacionales y el Europeo de la categoría.

«El atleta, aunque parezca un hombretón de casi 1,90, es de categoría juvenil y sigue estando muy tierno. El trabajo de construcción a futuro es fundamental. Ahora mismo sus entrenamientos no están enfocados a la obtención de rendimiento a través de la calidad sino a la evolución a través de la construcción. Hay que trabajar fuerza, flexibilidad, todos los temas técnicos, condicionantes psicológicos… no es el momento de apretar las tuercas a un chaval que se está formando. Es el momento de que vaya obteniendo sus resultados según va evolucionando en ese proceso», explica Felipe Castañer.

El entrenador destaca la buena hornada de atletas del club que están en los primeros puestos del ránking nacional y en pruebas técnicas, con David Cartiel como punta de lanza. Sus resultados le sitúan con «opciones de estar en los primeros puestos en el Campeonato de Europa este verano» y suponen «que vamos en la línea de seguir evolucionando, equiparando las marcas a los grandes talentos que ha habido a su edad. Estamos en la línea y vamos a seguir trabajando con humildad», concluye Castañer.