Chakib Lachgar es el gran bastión del Simply Scorpio. Con el atleta marroquí de 29 años el conjunto amarillo tiene casi el triunfo garantizado. Lachgar es un seguro de vida. Y esta tarde en la pista soriana de los Pajaritos nadie apuesta por otra cosa que por la victoria del mediofondista en los 3.000 lisos. «Quiero bajar de 8 minutos y ganar la carrera. Podemos quedar por equipos entre los tres primeros. Será difícil, pero hay que intentarlo», dice motivado. Es un todoterreno, desde los 1.500 hasta los 5.000 metros. Atleta de gran resistencia, su final es mortífero.

Comenzó tardíamente a practicar el atletismo con casi 23 años. Y lleva en España desde el 2008. Vive hace diez años en San Sebastián y hasta hace poco trabajaba de obrador en una pastelería. Ahora ha decidido volcarse con el atletismo y lo prepara desde Rabat Abdelkader Kada, el técnico que llevó al legendario Hicham El Guerrouj. «Ahora quiero ser profesional del atletismo. Me preparo solo y esto es difícil», asegura el atleta del Scorpio.

Lachgar nació en una aldea a 80 kilómetros de Marraquesh. Se llama Ouvagvi, que tiene tan solo 80 habitantes. «Ahora vivo con un amigo y un hermano en Rentería. San Sebastián es una ciudad muy bonita y hospitalaria. La gente es muy amable». Vino al Scorpio hace dos años. «Miré clubs y hablé con Ester Lahoz por teléfono y llegamos a un acuerdo. Me tratan bien en el club», afirma.

El marroquí está en el mejor momento de su vida. «El otro día en la ciudad belga de Ordegen hice 3.40.46 en los 1.500. En 3.000 lisos tengo 8.02 y en 5.000 cuento con 13.12. En los 10 kilómetros ruta logré 29.08 y 50 segundos en 400». Este año ganó el Nacional de cross corto.

Lachgar se define como un corredor rápido. «Me gustan las series de 300 y 400 metros. Ahora trabajo el fondo para hacer un buen 5.000 y un buen 1.500». Su objetivo en este año es bajar de los 3.40 en los 1.500 lisos. «De cara al año que viene quiero hacer la mínima para el Mundial en los 1.500 o los 5.000 lisos. Tendría que correr por debajo de 3.36 o de 13.25 en los 5 kilómetros. Lo intentaría con Marruecos», sentencia con convicción.