La victoria del Madrid ante el Atlético con un solitario gol de Benzema reafirma, en los dos bandos, las virtudes y los defectos que antes del revelador duelo ya se intuían. Desde la sobriedad defensiva del Madrid hasta la inoperancia ofensiva de un Atlético refugiado en la polémica, todo quedó revelado a la luz con el derbi: En la jornada 22 de una Liga, el Atlético tiene este curso el peor registro goleador de su historia: 22 goles, el Madrid ha encajado menos que nunca a estas alturas: 13 goles.

FRUSTRACIÓN ATLÉTICA

La derrota en el Bernabéu de los de Simeone supone el adiós definitivo a la pelea por el título de Liga y, de paso, la llegada de viejos problemas para asentar su plaza de Liga de Campeones. ·Seguro que cumpliremos el objetivo", dijo Simeone tras el partido para seguir con su constante rebaja, siempre entre líneas, de las aspiraciones de su equipo.

Desde las más altas instancias del club rojiblanco, las amargas quejas del presidente Enrique Cerezo responsabilizando a la actuación arbitral de la pobre puesta escena de su equipo le han dado a la afición el refugio que ha albergado buena parte de sus frustraciones con el fútbol del equipo.

Todo en una jugada que no entra dentro del protocolo de actuación del videarbitraje. Aunque sea considerado penalti por algún espectador, el árbitro ve la jugada con claridad y, en ningún caso, puede considerarse un fallo claro, obvio y manifiesto digno de una revisión. Un choque que puede ser considerado infracción, una ocasión de Vitolo y otra de Correa es un cobijo demasiado pequeño para todas las desilusiones rojiblancas.

Las bajas de nombres llamados a ser clave le están haciendo mucho daño a la ya de por sí corta plantilla rojiblanca: desde Joao Félix hasta un Diego Costa que apura plazos para llegar a la ida de octavos de final de la Liga de Campeones ante el Liverpool. Ese será el siguiente punto de control en camino de Simeone, con la amenaza de ser el último.

FELICIDAD BLANCA

En la otra mitad de la ciudad reina la alegría de una victoria ante el rival capitalino, también la satisfacción porque Zidane ha solventado todas sus carencias goleadoras con una fortaleza defensiva histórica, pero el problema para marcar no ha desaparecido.

Con una marca de siete de los últimos diez partidos sin recibir gol, incluidos enfrentamientos con el Barça, el Athletic y dos veces el Atlético, la solidez del Madrid empieza a alcanzar límites insospechados, tanto como para hacer olvidar los ya célebres 50 goles por temporada de Cristiano Ronaldo a base de defensa.

El doble cambio que acometió Zidane al descanso para darle un giro al partido ante el Atlético era una contramedida arriesgada, pero que el técnico francés sabía que contaba con el sustento de la fiabilidad defensiva de su equipo.

REGRESO DE HAZARD

En la buena dinámica que aportan los resultados, aunque la victoria en el derbi estuviera lejos de ser un triunfo claro e insostenible, el siguiente compromiso del Madrid es una Copa del Rey en la que el Atlético tiene otro borrón importante de la temporada. Los de Zidane reciben este miércoles a la Real Sociedad en el Bernabéu con la posible novedad de Hazard, ya en disposición de entrar entre los convocados.

El que no tendrá asegurada su presencia en los cuartos de final de Copa, ni en ningún compromiso importante, es un Gareth Bale que fuera de la convocatoria ante el Atlético por decisión técnica, pese a estar totalmente recuperado de sus dolencias. Zidane parece cansado de la selectiva salud física del atacante británico y las oportunidades para Bale parecen decrecer conforme gana enteros el equipo como conjunto, lejos de las individualidades que marcaron la época de Ronaldo y el tridente.