Carmen Pérez González, la jueza única de Competición, no entró a decidir sobre el fondo de la cuestión que motivó la denuncia del Levante contra el Barcelona, la posible alineación indebida del jugador del filial Chumi en Copa. Competición estimó como primer hecho fundamental y vinculante que el recurso del conjunto valenciano se produjera «fuera del plazo reglamentariamente establecido», decía el escrito. Y por ese motivo rechazó cambiar el resultado de la eliminatoria que el Barça ganó en el campo el pasado jueves con un 3-0 y que le otorgó una plaza en cuartos de final. Ayer entró en el sorteo y quedó emparejado con el Sevilla, primero en Nervión. El resto de cruces de cuartos son: Girona-Real Madrid, Getafe-Valencia y Espanyol-Betis. La ida, la semana que viene. La vuelta, la siguiente.

La resolución no es más que un punto y seguido en la batalla que decidió iniciar el Levante, después de que Valverde alineara a Chumi en Copa pese a estar sancionado por acumulación de amarillas con el filial, y en la que, parece, va a cumplir su intención de llegar hasta las últimas instancias. El defecto de forma que no ha permitido que la juez decidiera sobre la cuestión fundamental mantiene en la misma tesitura a los dos clubs, cargados de razón con sus argumentos y a la espera de una sentencia que aborde el tema de fondo.

Minutos después de que se hiciera pública la resolución que no le daba la razón, el Levante emitió un comunicado en el que refrendó sus intenciones de seguir con la lucha legal: «El Levante UD va a presentar recurso esta misma tarde (ayer) ante el Comité de Apelación de la RFEF para que el Comité pueda resolver a la mayor brevedad posible», rezaba el comunicado.

El Barcelona, por su parte, mantuvo su discurso de tranquilidad y convencimiento, que había abanderado Valverde, tras conocer el la resolución de la juez única: «Hay un plazo que estaba absolutamente agotado y no había caso», dijo Josep Vives, portavoz del club catalán, mientras intentaba aparentar seguridad en una cuestión de fondo sobre la que, antes o después, tendrá que decidir un juez: «No tenemos que preguntar si tenemos razón o no. Creemos que podía jugar tranquilamente», remató.

LA DENUNCIA / El Levante presentó la denuncia ante la Federación a las 09.33 horas de ayer, como había anunciado su presidente tras caer eliminados en el Camp Nou, ocho días después del partido al que se refería, cuando el plazo establece que cualquier alegación debe presentarse antes de las 14.00 horas del segundo día hábil tras la celebración del partido. Un plazo que, según la Federación, queda reducido a 24 horas al haberse jugado en día entre semana, por lo que el equipo presidido por Quico Catalán debería haber presentado la reclamación antes de las dos de la tarde del viernes 11 de enero.

A la espera de lo que resuelva Apelación, aún con instancias por encima hasta llegar al Tribunal de Arbitraje Deportivo, el enfrentamiento de artículos legales que legitiman la posición de cada uno de los clubs sigue sin resolverse.