Las exámenes médicos a los que ha sido sometido este miércoles el goleador hispanobrasileño Diego Costa han confirmado que no hay rotura pero que la lesión muscular que padece le impedirá jugar, casi con toda seguridad, la vuelta de cuartos de la Champions ante el Barça, que se celebrará el próximo miércoles en el estadio Vicente Calderón. Todo parece indicar que estará en dique seco entre 7 y 10 días.

"Yo llego a todo", ha dicho a la salida de la clínica FREMAP de Majadahonda la máxima estrella del Atlético, que marcha líder en la Liga y que el martes empató en el Camp Nou, en la ida de la eliminatoria europea (1-1). "Estoy mejor que ayer. Solo tengo un poco de dolor", ha añadido. Donde no llegará seguro es al partido del sábado, en casa ante el Villarreal.

De acuerdo con el parte médico difundido por el club rojiblanco, el delantero sufre una "lesión muscular grado I del músculo semitendinoso de cara posterior del muslo derecho". No es una rotura y queda pendiente de evolución, lo que implica que el plazo de recuperación puede ser variable. Los servicios médicos del Atlético pueden incrementarlo en días o, quizá, reducirlo para forzar su aparición en el partido contra el Barcelona.