Catorce de los 19 presidentes de las federaciones terriotoriales de fútbol han presentado este viernes su dimisión como miembros de la junta directiva de la Federacíon Española de Fútbol (RFEF), presidida en funciones por Juan Luis Larrea, después de la suspensión cautelar por un año de Ángel María Villar.

La dimisión se ha producido después del traslado por parte del Consejo Superior de Deportes al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) de la solicitud de apertura de expediente disciplinario a los cinco miembros de la junta directiva que están siendo investigados en la Operación Soule. Se trata de Vicente Muñoz (Valencia), Antonio García Gaona (Ceuta), Diego Martínez (Melilla), J. Miguel Monje (Murcia) y Jacinto Alonso (Rioja).

Eran los cinco que principio tenían preparada ya su renuncia y a ellos se han unido los otros nueve --todos salvo los de Galicia, Aragón, Andalucía, Castilla-La Mancha y País Vasco-- como muestra de solidaridad aunque también como precaución para no ser suspendidos si son también imputados en un futuro. Todos los dimisionarios, fieles a Villar, tenían previsto dimitir si el expresidente de la RFE no lo hacía antes, cosa que no ha sucedido.

SITUACIÓN INSOSTENIBLE

El presidente del CSD, José Ramón Lete, les ha convocado a todos el martes. Está muy preocupado por la situación que atraviesa la RFEF, que califica como "insostenible" y considera que Villar debía renunciar cuanto antes. Es lo que piensa también el presidente de la AFE, Luis Rubiales, quien tiene en mente optar a la presidencia de la Federación Española.