Esta vez no hubo sufrimiento. Rafael Nadal salió dispuesto a no desperdiciar su oportunidad de defender el título del Masters 1.000 de Roma y en 1 hora y 22 minutos certificó su pase a la final tras imponerse al búlgaro Grigor Dimitrov por 6-2 y 6-2. En el Foro Itálico (16.00 horas, La 1) le esperará hoy Novak Djokovic, el hombre con el que mantiene el pulso por el número 1 mundial, que ayer se deshizo en un durísimo partido del canadiense Milos Raonic por 6-7 (5-7), 7-6 (7-4) y 6-3.

Nadal llega preparado para el reto en el que será el 41° enfrentamiento entre ambos. La forma de deshacerse de Dimitrov, número 14 mundial, le permitirá entrar en la central del torneo italiano con las mejores sensaciones y la máxima motivación. El calvario pasado durante la semana encuentra ahora el mejor premio para un duelo apasionante. "Sufrir siempre vale la pena. Lo importante es que ahora siento una gran sensación de competitividad y de estar bien conmigo mismo. Es importante aceptar las adversidades", recalcó el campeón.

Roma asistirá hoy a una prueba de fuerzas de Nadal y Djokovic con el objetivo fijado ya en París. Los dos se mostraron reservados. El tenista serbio destacó que la trabajada victoria lograda ante el bombardero Raonic le da "fuerza y confianza para la final y el resto de temporada". El número 2 mundial también ha tenido que sufrir para alcanzar la final.