Estuvo contra las cuerdas, pero Novak Djokovic ha logrado este viernes el pase a los octavos de final de Roland Garros al derrotar al argentino Diego Schwartzman (41º del mundo). Hasta dos veces ha tenido el serbio que remontar un set para acabar venciendo por 5-7, 6-3, 3-6, 6-1 y 6-1.

Pese a empezar bien la primera manga (3-1), al número dos del mundo se le acabó atragantando un Schwartzman que perdió el miedo a su rival hasta llevarse el primer set. El serbio aceleró al final de una igualada segunda manga y su rival, tras salvar cuatro bolas de rotura, cedió su saque para que Djokovic igualara con su servicio.

PITOS DE LA GRADA

Pese a que se abrían paraguas en la grada, el partido siguió adelante. El argentino desesperaba al vigente campeón, que llegó a tirar su raqueta al suelo, lo que le costó los silbidos de la grada. Muy seguro desde el fondo de la pista, Schwartzman se llevó el tercer parcial ante un errático Djokovic.

Otra vez contra las cuerdas, el serbio se puso serio y arrancó la cuarta con un 4-0 inapelable. Y hasta ahí le duró la energía a Schwartzman, que con problemas físicos solo pudo conservar una vez su servicio en el quinto set. Djokovic, en un gran gesto, aplaudió junto a todo el público la salida de la pista del argentino.

El tenista serbio se medirá en cuarta ronda con el ganador del duelo entre Albert Ramos y Lucas Pouille.