El Zaragoza, que hoy partirá con destino a Viena, espera sentenciar mañana su pase para los dieciseisavos de final ante el FK Austria. Una victoria, tras ganar en el debut en la liguilla al Utrecht (2-0), sería casi definitiva, ya que dejaría sellado el pasaporte, puesto que se clasifican los tres primeros de grupo y situaría al equipo aragonés con dos partidos por delante --ante el Dnipro en La Romareda (1 de diciembre) y frente al Brujas en Bélgica (16)-- para intentar alcanzar el primer puesto, que implica medirse a uno de los equipos que acabe en tercera posición en el resto de los grupos, mientras que los segundos se enfrentarán a los equipos que caen en la Champions.

Pero eso queda todavía lejos y lo primero que se piensa en la plantilla zaragocista es en sellar una clasificación que se puso muy de cara con el debut victorioso frente al Utrecht. "Matemáticamente valdría con otra victoria, ya que sumaríamos seis puntos, aunque tampoco te puedes fiar y tenemos que conseguir el mayor número posible", señaló ayer el guardameta Luis García.

LAS CABALAS Esa primera jornada sirvió, además, para que el Brujas cayera en terreno del Dnipro (3-2). Así, los de Víctor comandan la clasificación y un triunfo en el Ernest Happel Stadion podría servir para abrir brecha, ya que el conjunto ucraniano, que baja enteros a domicilio, tiene una difícil salida en Utrecht.

El Austria descansó en ese arranque de la liguilla y en esta jornada le toca turno al Brujas, mientras que en la tercera (25 de noviembre) será el Zaragoza el que no juegue. Por ello, llegar al parón con dos triunfos y un incontestable liderato en el grupo es considerado muy importante en la plantilla, que, eso sí, tendrá que mejorar el mal balance que lleva como visitante desde que arrancó el curso, que contrasta con su fortaleza en La Romareda, donde acumula siete partidos consecutivos (cinco de Liga y dos de Copa de la UEFA) con triunfos.

Y es que, dejando al margen la Supercopa, con el gran partido en Mestalla, el Zaragoza sólo ha ganado en terreno del Sigma Olomouc, donde tuvo que remontar en media hora después de que el conjunto checo se adelantara con 2-0 y pusiera en peligro la clasificación para la liguilla. Mucho peor le ha ido en Liga, donde colecciona un empate, en Málaga (0-0), y tres derrotas, ante el Barcelona (4-1), el Villarreal (2-0) y el Racing (1-0), con pésima imagen de por medio, por no mencionar el batacazo copero en el feudo del Nástic. "Tenemos que mejorar a domicilio. Salir con más atención, agresividad y hacer lo que hacemos en casa: jugar al fútbol y disfrutar. Ahora, tenemos tres salidas consecutivas --Viena, Atlético y Valencia-- y es un buen examen", dijo Savio. Esa prueba comienza mañana, con el añadido que ganar da en la práctica el pase para la siguiente ronda europea.