Hubo un veterano y prestigioso periodista británico que llegó a escribir en su blog, muy seguido por los 2.000 habitantes del paddock del Mundial de MotoGP que tenía la sospecha, solo la sospecha, de que Marc Márquez (Honda) se dejó ganar, en la misma línea de meta del circuito de Mugello, ante 100.000 tifosi, por el italiano Danilo Petrucci (Ducati) con la intención de generar mal rollo en el seno del equipo Ducati Corse, al avivar la competencia entre el segundo piloto de la escudería y el titular y doble subcampeón del mundo, el italiano Andrea Dovizioso.

Muchos en el mundo de las dos ruedas piensan que esa tesis, como suelen decir los italianos, se non e vero, è ben trovato, pues tiene algunos visos de credibilidad. Pero, realmente, si uno conoce bien a Márquez (y ese veterano especialista lo conoce bien) sabe que nada le hubiese gustado más al catalán que vencer en casa de los italianos, en el jardin de Valentino Rossi y Ducati, en casa de Dovi y Petrux. Perdió ante Petrucci por 43 milésimas de segundo!, como había sido derrotado, en el primer GP de la temporada, en Catar, por 23 milésimas de segundo! por Dovi.

Lo que sí es evidente y quedó demostrado, el pasado fin de semana, en Assen (Holanda), la catedral del motociclismo, es que el poderoso dominio de Márquez en MotoGP y la imposibilidad de que las dos estrellas de la firma de Borgo Panigale le presenten batalla, individual o colectivamente, ha provocado una crisis enorme, tremenda, de consecuencias desconocidas en el seno del equipo Ducati, que, pese a aquella victoria de Petrux en Mugello, aún no ha ofrecido la renovación auténtica a su segunda espada, el único piloto oficial que carece de contrato para el año que viene.

¿DUCATI TIENE LA MEJOR MOTO?

La situación es verdaderamente preocupante para la afición italiana. Los responsables de Ducati creen tener la mejor moto de la parrilla de MotoGP y, por tanto, no parecen dispuestos a gastarse demasiado dinero en sus pilotos al considerar que con su moto ganaría cualquiera. O casi. Pero lo cierto es que no ganan. O no ganan lo suficiente para sacar a Márquez del primer puesto. Dovizioso aseguró, tras acabar cuarto en Assen, que eso de que la Desmosedici es la mejor moto de la parrilla es un invento de la prensa y una excusa que utilizan los rivales para justificar que no ganan o que les gana Ducati, pero no es cierto; todas las marcas han evolucionado, en los últimos meses, más que Ducati y, ahora, no siempre tenemos la mejor moto.

Y qué dice Petrucci? Está desesperado. Según la rumorología del paddock, la primera oferta de Ducati para que siga en su equipo la próxima temporada es idéntica, en dinero, a lo que cobra este año, pese a haber ganado ya un GP (Italia) y ser tercero del Mundial, a 52 puntos de Márquez y a solo 6 de su compañero Dovizioso. En Assen, Petrux superó a Dovi varias veces y el subcampeón le devolvió los adelantamientos. Al final, Petrux dudó, no supo qué hacer, temió no renovar su volvía a ganar a Dovi y, en la duda, apareció Franco Morbidelli (Yamaha) y le arrebató la cuarta plaza.

He de hablar con los jefes antes de la carrera de este domingo en Alemania, no puedo seguir así, señaló muy enfadado Petrucci, que se niega a hablar de la oferta de Ducati porque me complicaría la vida. Debo de ser muy cuidadoso a la hora de enfrentarme a Dovi. Él es segundo del Mundial y el objetivo de Ducati es el título con él. Me paso la carrera dudando si pasarle o no. Es complicado, pues para conseguir renovar debo hacer resultados, pero he de respetar a Dovi. Estoy entre el yunque y el martillo.

La opinión más generalizada es que Ducati debería haber renovado ya a Petrucci tras su victoria en Mugello y, tal vez, una vez renovado, decirle, abiertamente, que Dovi sigue siendo la punta de lanza del proyecto y debe ayudarle a derrotar a Márquez. Dovizioso, por su lado, mostró su extrañeza, en la tarde del domingo, sobre los comentarios hechos por Petrux. Él me ataca en la pista y yo, le respondo, pero los dos usamos la cabeza. Petrucci debería estar tranquilo. Me extraña su actitud. Él conoce bien Ducati. Ha demostrado ser un buen piloto. Los que tienen posibilidades de sustituirle (Dovizioso se refiere al australiano Jack Miller, en el equipo satélite de Pramac), lo están haciendo peor que él. Además, somos la pareja oficial que más puntos ha conseguido y hacemos que Ducati lidere, con cierta ventaja, el Mundial de constructores (224 puntos por 179 de Honda), que les interesa mucho.

NÚMEROS MUY IGUALADOS

Lo cierto es que, queriendo o sin querer, el tremendo dominio de Márquez en el Mundial cuatro victorias (Argentina, Jerez, Le Mans y Barcelona), tres segundos puestos (Catar, Italia y Holanda) y una caída (EEUU)--, le ha colocado con una gran ventaja al frente del campeonato (Marc sabrá administrar esos 44 puntos con inteligencia, va a ser muy difícil restárselos, insiste Dovi) y, además, ha generado una gran crisis en el seno de Ducati, parecida a la que podría vivir Valentino Rossi (tres ceros seguidos: Mugello, Barcelona y Assen) frente a un resucitado Mavarick Viñales, brillante vencedor en Holanda.

Analizando los ocho grandes premios que ya se han disputado (Catar, Argentina, EEUU, Jerez, Francia, Mugello, Barcelona y Holanda), observando los entrenamientos y las carreras, podemos comprobar que Dovizioso ha quedado en 20 ocasiones pordelante de Petrucci en los diversos ensayos previos al GP y, ya en carrera, el domingo, 'Dovi' ha terminado 6 veces por delante de su compañero, mientras que Petrucci, lo ha hecho en dos. Dovizioso ganó en Catar y Petrucci, en Italia.