Chechu Dorado conocerá en las próximas horas el alcance de la lesión que sufrió el pasado lunes en Palma de Mallorca y que le obligó a abandonar el terreno de juego cuando apenas se había cumplido el primer cuarto de hora de partido. En principio, todo apunta a que el cordobés sufre una rotura en el sóleo de su pierna derecha, una zona en la que el jugador llevaba tiempo con pequeñas molestias.

Si se confirma, la dolencia mantendrá a Dorado alrededor de tres semanas fuera de los terrenos de juego, lo que le privará de participar en un tramo decisivo para las aspiraciones de salvación de los aragoneses. Así, Dorado no estaría presente ni frente al Nástic el próximo lunes, ni en Cádiz, ni tampoco la semana siguiente frente al Alcorcón en La Romareda, pero su concurso la siguiente jornada -en la última semana de abril en Córdoba- estaría garantizado, ya que el Zaragoza guardará descanso la semana anterior al estar programado para entonces el encuentro ante el Reus que no se disputará al haber sido el club catalán expulsado de la competición.

La lesión de Dorado se produce después de que el andaluz haya sido titular en el centro de la zaga en los seis últimos partidos del Zaragoza y disputando todos los minutos después de haber jugado un solo partido en Liga con el Rayo Vallecano, club con el que rescindió contrato en enero para fichar por el Zaragoza.

Con la lesión de Dorado son ya tres en los cinco últimos partidos los percances sufridos por jugadores del equipo aragonés antes de la primera media hora. Antes cayeron Benito, la jornada anterior frente al Elche, y Guitián, en El Sadar ante Osasuna.

Dorado fue uno de los ausentes en la sesión preparatoria celebrada ayer por la tarde en las instalaciones de la Ciudad Deportiva y en la que participaron activamente tanto los jugadores no convocados para el partido ante el Mallorca como los que no contaron con minutos.