El Ebro sigue mejorando sus prestaciones con el paso de las jornadas. Tras el triunfo ante el Hércules la pasada semana por 1-0 visitaba La Almozara el Villarreal B, uno de los equipos más potentes del grupo. Con cuatro victorias y dos empates el filial amarillo se ha postulado como un claro candidato a las posiciones de promoción, gracias a un fútbol alegre y con la alta efectividad de sus atacantes. Fruto de esta premisa llegó el primer tanto visitante, Dalmau se aprovechó de un balón muerto en el corazón del área para adelantar a su equipo. Los jugadores del Ebro protestaron con efusividad un posible fuera de juego del ariete castellonense.

Con el paso de los minutos se fue evaporando el dominio visitante, con un Ebro que trataba de contrarrestar la calidad coral del filial con una intensidad asfixiante. Los de Emilio Larraz dieron su primer zarpazo gracias a una ocasión del veterano Mainz tras un pase de Gerrit, pero Roger sacó el esférico en la línea de gol cuando el público de El Carmen cantaba el gol. Fue a la vuelta de vestuarios cuando el Ebro logró establecer la igualada, Javi Cabezas armó su pierna zurda para perforar la meta de Diego con un potente disparo que se ajustó a la cepa del poste izquierdo. Con las tablas en el marcador salió a relucir una de las principales características del Villarreal B, esa poderosa facilidad para marcar que tantos buenos resultados les permite cosechar. Dalmau volvía poner por delante a los castellonenes a merced de un centro que remató a placer en el área defendida por Salva.

Ese tanto visitante sirvió para reanimar al Ebro, que no perdió la fe ni cedió ante su oponente en ningún tramo del encuentro. Fue el máximo artillero de los aragoneses el que volvió a poner la igualada en el marcador mediante una jugada de nacida desde la pizarra. Alex Cruz lanza un saque de banda con vehemencia, a modo de centro, lo que permitió a Rubiato sacar la caña y pescar en el segundo palo su cuarto gol de la temporada. A partir de este momento los aragoneses ofrecieron su mejor versión ante un filial amarillo que no consiguió trenzar con comodidad su juego de elaboración. La victoria pudo caer para el equipo de La Almozara, pero Rubiato no consiguió definir ante un cancerbero visitante muy bien posicionado. El susto lo dio Salinas, que quedó tendido en el terreno de juego tras un choque con un defensor visitante, pero acabó levantándose ayudado por los servicios médicos tras ser atendido en el césped. El CD Ebro logró un empate dulce, cargado de sensaciones positivas ante un Villarreal B que sigue invicto en el grupo III de Segunda B.

CD Ebro: Salva, Regino, Diego Simón, Pajarero, Alfonso, Gerrit, Javi Cabezas, Adri Cuevas, Mainz ( m. 68’, Salinas) (m. 90’, Teo Tirado), Rubiato, Álex Cruz ( m. 66’, Borja Martínez).

Villarreal B: Diego, Miguelón, Juan Ibiza, Roger, Pau, Imanol, Chuca, Raba ( m.89, Pedro), Dalmau, Leo Suárez, (m. 74, Morlanes), Dario (m. 48, Simón

)Árbitro: Víctor García Verdura, catalán. Amonestó del Ebro a Adri Cuevas. Del Villareal B a Pau.El Carmen: 400 espectadores.