Llevan toda la vida en la Ciudad Deportiva, mano a mano, creciendo juntos, soñando con lo que sueñan todos, llegar al primer equipo del Real Zaragoza. Yannick Buyla y Marcos Baselga han sido los últimos en conseguirlo y para un canterano no puede haber algo más emocionante: "Para mí el Real Zaragoza es un sentimiento porque ya llevo muchos años, es el equipo de mi ciudad", dice Buyla. Recién renovados hasta el 2024, se han incorporado a los entrenamientos del primer equipo en esta vuelta al trabajo tras el parón provocado por el coronavirus y los dos hablan de lo mismo, de la alegría por la renovación y la promoción, el agradecimiento a quienes lo han hecho posible y las ganas de demostrar lo que valen sobre el césped.

"Estoy muy contento por firmar esta renovación de cuatro años. Agradecido a la directiva y el cuerpo técnico. Después de buenos y malos momentos es tiempo de demostrar que estoy capacitado y devolver la confianza que han depositado en mí. Al final llevo muchos años en la cantera y desde que entré con 11 años mi objetivo principal siempre ha sido pertenecer a la primera plantilla", señala Buyla. Ambos coinciden también en que el club ha confiado en ellos y ahora ellos deben devolver esa apuesta. "Ellos han depositado una confianza en mí que tengo que devolver trabajando. Con estos cuatro años que tengo por delante intentaré aportar lo máximo posible en los partidos y en cada entenamiento", apunta Baselga.

Los dos se conocen bien, por eso les hace especial ilusión dar este paso juntos. "Aparte de compañero, Baselga es muy muy amigo mío, llevamos mucho tiempo jugando juntos, nos entendemos en el campo a la perfección y tanto dentro como fuera tenemos una relación estupenda", indica Buyla, que alaba el trabajo con la cantera. "Creo que en la Ciudad Deportiva las cosas se están realizando bastante bien en cuanto a la cantera. A pesar de que haya dudas yo nunca las he tenido del funcionamiento de la cantera, por eso he estado aquí once años y la verdad es que estoy muy agradecido tanto a la gestión como a los entrenadores y todo el mundo que hace posible que estemos aquí".

En el primer equipo se van a juntar con otros compañeros de viaje en las categorías inferiores. "Tenemos buena relación. con Nick estoy desde su último año de juveniles, que era el segundo mío, somos muy amigos y estoy muy contento de haber subido con él. Es un orgullo. Ojalá poder vernos juntos en el campo, también con Clemente, Soro, compañeros con los que he estado toda la vida, nos conocemos bien y nos llevamos muy bien también fuera y dentro del campo. Sí me gustaría, la verdad, poder contar con minutos todos juntos y en primer equipo del Real Zaragoza", sueña Baselga.

El cambio del filial al primer equipo se nota incluso en estas circunstancias. "Al final del filial al primer equipo varía un poco, la verdad, hay más ritmo y tal, pero tengo buenas sensaciones, el grupo me ha acogido bastante bien y no tengo ninguna queja. En cuanto a la carga de trabajo los preparadores físicos están trabajando bastante bien ya que podemos entrenar todos los días con normalidad", explica Buyla, que ya debutó con el primer equipo ante el Extremadura. "Hace poco pasó un año desde el día que debuté y lo recuerdo como si fuera ayer. No lo voy a olvidar nunca, la verdad"

Ahora les toca seguir soñando en grande, con los once partidos que quedan por disputarse y con el ansiado ascenso. "Poco a poco, aún queda para volver pero preparando día a día el acercamiento de la competición y terminar esos partidos que quedan para conseguir lo que todo el mundo quiere. Sería un sueño pero quedan once partidos. A ver si puedo aportar algo. Con calma y a ver qué pasa", concluye Baselga.