El Real Zaragoza solo dispondrá de 5,5 millones de euros para pagar los refuerzos que incorpore este verano (hasta ahora han llegado tres y solo ha tenido que desembolsar una pequeña cantidad por Mario Paglialunga, que pertenecía al Catania) y también para hacer frente a las fichas de los jugadores de la plantilla de la temporada 2013-2014. Por ese motivo necesita dar salida urgentemente a futbolistas como Hélder Postiga, Antonio Galdeano Apoño, Luis García, Glenn Loovens, Adam Pinter e Ivan Obradovic, que en la mayoría de los casos superan ampliamente el tope salarial de 400.000 euros que se ha marcado el club aragonés para el próximo curso en Primera.

Solo las fichas de esos jugadores ya superan los 5,5 millones de euros que tiene el Zaragoza para confeccionar la plantilla que pondrá a disposición de Paco Herrera. Por ejemplo, Postiga cobra 1,7 millones de euros, Luis García supera el millón de euros, Apoño cobra 800.000 euros y la ficha de Obradovic ronda los 750.000 euros. La temporada pasada, en Primera División, el club pudo destinar 20 millones de euros para los gastos de la plantilla. Así, por el traspaso de Apoño, se comprometió a pagar al Málaga casi 850.000 euros en tres plazos por todos los conceptos.

El Real Zaragoza, debido a su delicada situación económica, va a escuchar ofertas por todos los jugadores de su plantilla, aunque Paco Herrera ha reconocido que sobre todo le gustaría que se mantuvieran en el equipo Álvaro González y Paco Montañés, por los que han preguntado varios clubs de Primera División. De los que quiere dar salida el más apetecible es Hélder Postiga, que ha sido el máximo goleador del conjunto zaragocistas en los dos últimos temporadas, pero hasta el momento solo se ha interesado formalmente por sus servicios el Sevilla. Lo que sucede es que el cuadro andaluz ha ofrecido 2,5 millones de euros por Postiga y el Zaragoza aspira a conseguir cuatro como mínimo. El delantero portugués ya tiene un acuerdo con el Sevilla para jugar en sus filas las tres próximas temporadas.

La intención inicial del Real Zaragoza era recuperar la inversión realizada para fichar a Apoño, pero todo apunta a que ahora se tendrá que conformar con encontrar un club que se quiera hacer cargo de su ficha (800.000 euros). Lo mismo puede sucederle con Pinter, cuyo traspaso se tasó en un millón euros, aunque ahora esa cantidad se quedará en alrededor de la mitad por haber sido incluida en el convenio con los acreedores, y con Ivan Obradovic, por el que tuvo que pagar más de cuatro millones. Luis García y Loovens llegaron libres. Especialmente difícil resultará la salida de Obradovic, que estuvo lesionado casi todo el curso pasado.

ADVERTENCIA DE LA LFP

La Liga de Fútbol Profesional (LFP), a través de Javier Tebas, ya ha advertido a los dirigentes del Zaragoza de que antes de incorporar más jugadores tendrían que dar salida a los futbolistas que no pueden entrar en sus planes en Segunda División por el elevado coste de sus fichas. Tebas afirmó incluso recientemente que si el club aragonés no consigue ese objetivo se encontraría con graves problemas para poder terminar la próxima temporada.

La única solución para que el Real Zaragoza pueda remontar tanto deportivamente como económicamente es que la próxima temporada consiga obligatoriamente el ascenso a Primera División. Durante la próxima campaña, por ejemplo, hubiera percibido 25 millones de euros por los derechos de televisión de haber estado en Primera, mientras que en Segunda División ingresará menos de tres millones.