La Copa del Rey está en juego esta tarde en el Príncipe Felipe (20.30 horas). El CAI Zaragoza recibe al Laboral Kutxa en un duelo decisivo, casi una eliminatoria por el torneo del KO: cuando restan por disputarse cuatro jornadas para el final de la primera vuelta, los aragoneses son séptimos con siete victorias y los vitorianos, novenos con seis. Un triunfo aragonés supondría descabalgar a su rival de la carrera por llegar a Canarias y dar un importante paso al frente, recuperando parte del terreno perdido en Andorra el domingo.

El CAI está en buena disposición y depende de sí mismo para lograr su objetivo, pero no puede despistarse. Y menos después de su decepcionante actuación en casa del Andorra. Con el Gran Canaria, anfitrión del torneo, fuera de los ocho primeros, el acceso a la Copa se encarece, desaparece una plaza por la que pelear. Para asegurar su clasificación, el equipo de Joaquín Ruiz Lorente debería ganar los dos partidos que le quedan en casa (Laboral Kutxa y Gran Canaria) e intentar una victoria fuera (Manresa o Gipuzkoa). Como es lógico, el margen de error es aún menor en el caso del Baskonia, que podría necesitar un pleno de triunfos en estas cuatro jornadas para lograrlo.

SIN VICTORIAS FUERA

El club vitoriano se juega mucho esta tarde, ya que una derrota le dejaría al borde del abismo en la carrera por la Copa. El Laboral Kutxa llega en plena transformación, fichando nuevos jugadores, dando de baja a otros, pero con mejores sensaciones con las que empezó la temporada. De la mano de Ibon Navarro, el equipo se ha metido en el Top 16 de la Euroliga y se ha enganchado a la lucha por la Copa. Además, llega de hacer un partido redondo ante el Sevilla, al que vapuleó por 100-60 con Fernando San Emeterio como MVP de la jornada. Eso sí, el conjunto vasco continúa sin ganar fuera de casa esta temporada. Seis desplazamientos en los que acumula seis derrotas hasta la fecha. Su último triunfo a domicilio se remonta al pasado 18 de mayo, precisamente en Zaragoza.

El CAI Zaragoza tiene ante sí la oportunidad de demostrar que su actuación del domingo en Andorra fue un mal día, un accidente, y que su rendimiento está más próximo a lo que fue capaz de ofrecer apenas una semana antes frente al Unicaja. La capacidad de respuesta y de reacción es un buen baremo para calibrar la grandeza de un equipo. El conjunto aragonés deberá estar atento a lo de siempre, a no conceder rebotes de más a su rival --ambos están entre los cuatro peores en las capturas ofensivas--, a no perder más balones de los necesarios, pero lo más importante es mostrar la actitud adecuada. "No tenemos que cometer tantos errores como hicimos ayer --por el domingo--. Planteas cosas pero no siempre salen y tienes que buscar soluciones. Hemos de minimizarlos y tratar de jugar como contra Unicaja", indica el técnico del CAI, Joaquín Ruiz Lorente.