El Binéfar, aun con diez jugadores la mayor parte del encuentro, fue el único que quiso jugar, que llevó la iniciativa y que tuvo ocasiones para ante un Casetas defensivo que no arriesgó y se llevó un inmerecido empate.

La nefasta actuación arbitral marcó el partido y dejó al Binéfar con uno menos desde muy pronto por una injusta expulsión de Josan. Cuatro minutos antes, Viladegut había adelantado a los locales. En el minuto 78 el Casetas empató y aun así, con rigor defensivo y casta, el Binéfar mantuvo el resultado e incluso pudo llevarse el encuentro en algún contragolpe.

Al final, los locales acabaron con nueve hombres un encuentro en el que destacaron la clase de Viladegut, el trabajo de Riera y el visitante Gandú.