Marc Márquez y Jorge Lorenzo son los integrantes del equipo Repsol Honda más ilusionante para el campeonato del mundo de MotoGP del 2019 que comenzará el próximo 10 de marzo en Catar y que ayer se presentó en la sede de la empresa petrolera en Madrid. 138 victorias, 268 podios y los siete títulos mundiales de Márquez o los cinco de Lorenzo son argumentos más que suficientes como para comprender el potencial con el que cuenta el equipo.
El vigente campeón del mundo restó importancia a esa «cacareada» rivalidad entre ambos por estar en el mismo equipo al asegurar que «la tónica es la que ha comentado Lorenzo», y es que los dos lucharán «por el mismo objetivo», pero querrán «lo mejor para el equipo». «Es bueno que haya esa competencia, pero nos ayudará a crecer de nivel y para llevar buenos resultados a nuestro equipo», comentó Márquez.
Por su parte, Jorge Lorenzo reconoció que llegar a este equipo «no fue fácil al principio, pero luego salió» y está «muy feliz de formar con esta escudería». «Todos saben cómo fue mi pasada temporada. Puse más energía que nunca, pero los resultados no llegaron y por eso hablé directamente con Honda», dijo. Además, sobre su nueva moto, el balear cree que «no es más física que la Ducati». «Me pareció más pequeña que la anterior, llegaba más fácil al asfalto, y eso te da confianza», concluyó.
