El equipo español de Copa Davis no elude la condición de favorito con la que partirá este viernes en su eliminatoria de cuartos de final ante Holanda. El hecho de jugar en casa (Palma de Mallorca), sobre tierra batida y de haber recuperado a su número uno, Juan Carlos Ferrero, tras haber sufrido varicela, han disparado el optimismo tanto en el conjunto español como en el entorno. "Jugando en casa y en tierra batida, España es favorita ante cualquier equipo del mundo", aseguró uno de los tres capitanes españoles, Jordi Arrese.

Arrese, junto a los otros dos capitanes, Juan Bautista Avendaño y Josep Perlas, así como los cuatro jugadores --Ferrero, Robredo, Moyá y Nadal--, fueron acogidos ayer en el Ayuntamiento de Palma y mañana se celebrará el sorteo en el Coliseo Balear, la plaza de toros habilitada para los cinco partidos que deben dar al equipo español el pase a semifinales, donde se mediría a Suiza o Francia, siempre en pista contraria.

Tras dos días de entrenamientos, los jugadores se mostraron encantados con la pista construida sobre la arena del coso taurino con tres capas de diferentes tipos de arcilla y animaron al público para que llene las gradas.