La revancha existe. España y Alemania se reencuentran en la final del Europeo sub-21 (20.45 horas, Cuatro), repitiendo la que protagonizaron en el 2017. Ganó Alemania entonces, con un gol de Mitchell-Elijah Weiser. Siete jugadores españoles (Meré, Vallejo, Ceballos, Soler, Merino, Mayoral y Oyarzabal) podrán sacarse la espina que les quedó clavada en Cracovia hace hoy dos años.

El torneo empezara con una derrota ante Italia, el anfitrión, más contundente en el marcador (1-3) que en el césped, pero después llegó la reacción ante Bélgica (2-1) y, posteriormente, las goleadas a Polonia (5-0), que concedió el primer premio con la clasificación para los Juegos de Tokio 2020 al acceder a la semifinal, y sobre Francia (4-1).

Las goleadas de España se han producido con un 4-1-4-1 en el que el realista Mikel Oyarzabal, ha ejercido de delantero centro. La llegada de los hombres de la segunda línea (Fornals, Ceballos, Fabián y Olmo), protegidos por el españolista Marc Roca, ha multiplicado la producción goleadora con nueve tantos en dos partidos. Borja Mayoral, un nueve puro, ha entrado en cada partido como revulsivo en la segunda parte.

El zaragozano Jesús Vallejo subrayó que «estamos muy bien» ya que «hemos ido de menos a más», y resaltó que «la victoria contra Francia ha sido un plus». «Estamos siendo un equipo y mañana lo vamos a demostrar. Para mí es el partido de mi vida y nos jugamos muchísimo», agregó el central del Real Madrid.