Lituania es el primer obstáculo, el primer enemigo a batir camino de los cuartos de final del Campeonato de Europa júnior. Será esta noche, a partir de las 21.00, en el Príncipe Felipe. España promete en su debut ambición, trabajo y mucha ilusión, se ha fijado en la generación de Gasol y Navarro, que conquistó el título hace dos ediciones, y busca un sitio propio en la historia de este deporte. El año pasado, la generación del 87 fue cuarta en el Europeo cadete. Ahora quieren dar un paso más.

El futuro del baloncesto continental se reúne en Zaragoza en un torneo más igualado que nunca. Hay favoritos, los habituales. Turquía lleva más de un mes preparándose para la cita, Serbia y Montenegro, Grecia o Lituania aparecen en los primeros puestos en todas la quinielas, sin olvidar a España, que quiere aprovechar el factor cancha para lograr el éxito. Pero las futuras estrellas pueden estar en cualquier equipo y aparecer en cualquier momento. Ahora no se les conoce, pero Turkoglu, Nowitzki, Toni Parker o Pau Gasol, que no era titular, brillaron en un Europeo júnior antes de deslumbrar en la NBA.

La palabra que más se oye en el entorno del equipo español es ilusión. Y con motivo. Los precedentes del combinado nacional sólo pueden conducir al optimismo. Además del cuarto puesto del Europeo cadete del año pasado, la selección dirigida por Txus Vidorreta fue tercera del torneo de Mannheim, considerado un Mundial oficioso , pese a algunas ausencias importantes en esta última edición, como las de Grecia o Lituania. Ganó Turquía, por delante de Argentina, pero España logró el bronce derrotando a Serbia y Montenegro en un encuentro que se había puesto muy cuesta arriba. Llegaron a perder de 15 puntos, pero lograron darle la vuelta al marcador y ganar de cinco.

EL CAMINO Por eso la esperanza es llegar a las semifinales, acabar entre los cuatro primeros. Después, como suele repetir Vidorreta, ya veremos. Pero desear mucho una cosa no implica que vaya a convertirse necesariamente en realidad. Si España quiere pasar la primera fase, deberá superar a Lituania, Israel, Grecia, Bulgaria y Turquía o, al menos, buscarse un emparejamiento lo más asequible posible para cuartos de final terminando entre los cuatro primeros del grupo. En el A, comenzarán a jugarse el título Georgia, Serbia y Montenegro, Rusia, Letonia, Italia y Francia. De estos equipos saldrá el cruce de España, el siguiente obstáculo en la carrera hacia el triunfo final.

Para eso ha estado entrenándose desde el pasado 14 de junio. Primero participó en el torneo de Torrejón de Ardoz contra Turquía y Rusia. Esta semana se ha puesto a prueba en Huesca ante Letonia y Francia, a las que puede encontrarse en un cruce tras la primera fase. La experiencia resultó positiva y España ya está preparada para el asalto al trono europeo. Zaragoza marcará el principio del futuro.