La selección española de balonmano perdió la oportunidad de encarrilar su pase a las semifinales del Europeo de Croacia tras caer por 22-25 ante Dinamarca, en un duelo en el que los españoles nunca dieron la impresión de poder ganar. Lastrados por la falta de ritmo ofensivo en el primer tiempo e incapaces de dotar a su defensa de la solidez necesaria en la segunda mitad, el conjunto español siempre se vio a remolque, tanto en el juego como en el marcador, de una selección danesa a la que sólo le valía ganar, al contrario que al equipo español, que con dos puntos ya asegurados en la segunda fase, aun mantiene muy vivas sus opciones de pelear por las medallas que se hubieran multiplicado de haber ganado al equipo danés.

España no fue capaz de detener el carrusel ofensivo de Balling (ocho tantos) ni de Mikkel Hansen (seis). Tampoco con la irrupción del guardameta Gonzalo Pérez de Vargas, que con un par de buenas intervenciones, pareció propiciar una nueva oportunidad para el equipo español en la segunda parte. Al descanso se había llegado con una mínima renta de 13-14 para Dinamarca, que siempre dominó el partido.