El Espanyol consiguió su novena victoria en 15 partidos, la tercera consecutiva, y lo hizo a costa del Mallorca (2-1), un triunfo que tuvo el premio añadido de conseguir el segundo puesto en solitario en la clasificación. Los blanquiazules se sustentaron en la calidad de su meta Carlos Kameni, que con 1-0 detuvo un penalti y estuvo espléndido en todo momentos, y en la clarividencia de Iván de la Peña.

Pochettino adelantó a los catalanes en el 26 y Oscar Serrano puso casi la sentencia antes del descanso. Sin embargo, el gol de Pereyra puso en apuros al conjunto de Miguel Angel Lotina.