Un nombre nuevo acaba de emerger en esta noche de Champions: el del serbio Milan Pavokov. un delantero centro puro, de 24 años, que batió por dos veces a Alisson. El 2-0 sorprendió tanto al gurú del Liverpool, Jurgen Kloop, que solo fue capaz de mostrar una enorme sonrisa, como anuncio del miedo que se instaló en el cuerpo del entrenador durante el resto del partido. La garganta del enorme Klopp se quedó seca, como las ideas de sus futbolistas. Salah no es la sombra de lo que pareció ser. Mané desapareció. De nada sirvió tampoco la salida de Firmino, al que siempre se le encomienda los remedios.

El zarpazo de los serbios obligará al Liverpool a no fallar en los dos partidos que le quedan: batalla en Anfield contra el Nápoles y visita al PSG.

Hazaña en el pequeño Maracaná, el estadio del Estrella Roja de Belgrado, el del botellazo a Juanito y el gol con la espinilla de rubén cano que quedó registrado en la memoria de una generación de aficionados al fútbol como el camino de España al Mundial de Argentina 78. Desde ahora también se citará por la noche en que tumbó al subcampeón de Europa con un montón de raíces serbias y un exótico centrocampista nacido en las islas Moroes, en el Índico, y de nombre Ben Nabouhane.