Mañana de verano en el XXXIV Cross Jerónimo Zurita. Numerosos zaragozanos se dispusieron a gozar de las bellezas del Palacio de la Aljafería. Cerca de la fortaleza, desde las diez de la mañana, comenzaba la fiesta del atletismo con la carrera de los infantiles masculinos. Animó la matinal por la megafonía Sergio Garde, que vino desde Madrid. La prueba es el típico cross de barrio con muy buen ambiente. Por aquí no aparecen las figuras aragonesas (aunque estuvo presenciando las carreras Josá Antonio Casajús), ni los atletas marroquís.

Es la carrera de los populares y de los niños. Aunque en la prueba femenina sobre 3.700 metros ocuparon el podio tres mujeres muy bien conocidas de la concurrencia. Ganó Susana Ochoa, la presidenta de la Federación Aragonesa desde hace algo menos de un año. La zoitista es una habitual de esta prueba organizada por el Zurita. La segunda fue la veterana Cristina Jiménez y la tercera Yoanna Abadía, la hermana del olímpico Toni Abadía.

En la prueba masculina todos eran unos desconocidos, aunque el más popular era Paco Binaburo, que ha asistido a muchos Juegos Olímpicos como fisio de la selección española de baloncesto y ahora es un pollero consumado. Sobre 5.050 metros medio centenar de fondistas se presentaron en la línea de salida. La madre de Carlos Sebastián Fece, atleta que falleció perteneciendo al club organizador, cortó la cinta y recibió el ramo de flores. Los tres primeros de la carrera fueron el maratonaniano Agustín Moreno, del Running Zaragoza, Jesús Ramos y Guillermo Martínez.

Pero lo mejor de la jornada fueron las carreras para los aguiluchos. Niños de menos de cinco años que disputaron la carrera de 200 metros acompañados en algunos casos por sus padres. Y el colofón de esta bonita mañana fue la Carrera Parkinson en la que los deportistas hicieron una simbólica prueba de 100 metros. Imposible mejor manera de celebrar el Domingo de Ramos.