La enésima polémica del penalti injusto, el fuera de juego clamoroso y las encendidas protestas de presidentes, entrenadores y jugadores pueden pasar a mejor vida. Una historia que se repite cada domingo en los campos de todo el mundo ha llevado a Franco Carraro, presidente de la Federación Italiana de Fútbol (Federcalcio), a escribir una carta a Lennart Johansson y Joseph Blatter, presidentes de UEFA y FIFA, respectivamente, pidiéndoles que consideren la posibilidad de introducir cualquier tipo de artilugio tecnológico, una moviola o lo que se les ocurra, para evitar cada domingo el terrible espectáculo de las críticas, acusaciones e, incluso, insultos a la clase arbitral. Tanto Johansson como Blatter aceptaron por carta tratar el tema en las reuniones que sus comités ejecutivos celebrarán a lo largo de esta semana en Nyon (UEFA) y Zurich (FIFA).

Carraro explica en su carta que "las jugadas cada vez son más rápidas y los jugadores cada vez más maliciosos" y, sobre todo, el árbitro "es humano y no puede competir con los cientos de cámaras que filman cada detalle del partido" por lo que ha llegado la hora de que también el señor de negro pueda contar con la ayuda de un quinto hombre: la tecnología, que a modo de gran hermano vigile cada rincón del terreno de juego y le ayude a controlar el partido. La propuesta, elaborada hace años, se utiliza en deportes como el baloncesto, el fútbol americano o el rugby.