El culebrón Griezmann no se cerrará oficialmente hasta el 1 de julio, cuando su cláusula en el Atlético de Madrid pasará de los 200 millones de euros actuales a 120. El astro francés se ha empeñado en mantener y prolongar el misterio sobre su futuro, como ya hizo el año pasado, pero cada vez parece más evidente que jugará en el Barça. Esa es su elección. Por si había alguna duda, Miguel Ángel Gil Marín, dirigente del Atlético se encargó de arruinar el serial ayer. «Tengo muy claro dónde va a jugar Griezmann la próxima temporada. Se sabe desde marzo. En el Barcelona», aseguró sin reparos el consejero delegado del Atlético de Madrid.

El dirigente rojiblanco pronunció esas declaraciones en un escenario pintoresco. Desde la plaza de toros de Las Ventas de Madrid, Gil Martín no titubeó al valorar el destino del francés, que ha jugado en el Atlético las cinco últimas temporadas. A los 28 años, ha decidido cambiar de aires. El 14 de mayo anunció su marcha del equipo dirigido por Simeone, pero nunca ha dado demasiadas pistas sobre su nuevo club. Más bien al contrario.

El Principito comenzó la semana sin confirmar si seguiría en la Liga española. También se le ha relacionado, además del Barça, con el Madrid, el Paris Saint-Germain o el Bayern de Múnich. Tras la goleada ante Andorra del martes, en la que jugó todo el partido sin excesivo brillo, volvió a valorar su situación. «Yo también estoy impaciente, espero que todo se cierre lo antes posible. Entiendo que la gente quiera saberlo. Igual en dos semanas se sabe algo. Sé los sacrificios que tengo que hacer», comentó el delantero, que al menos reconoció saber dónde va a jugar el próximo curso, aunque no lo dio a conocer públicamente. Ante las continuas preguntas de la prensa, pidió «respeto y paciencia».

Aunque en las últimas semanas se había especulado, incluso, con el malestar del vestuario azulgrana por su posible llegada, el delantero apunta de nuevo al Camp Nou, donde le esperan compatriotas como Umtiti, Dembélé, Lenglet y Todibo. En su cambio de club también se verá afectado su salario. En el Atlético cobra 23 millones de euros gracias a la oferta de mejora que le hizo el club colchonero el pasado año para evitar su huida. En el Barça debería conformarse con 16, lo mismo que le ofreció en el 2018. La entidad culé también podría ofrecer un acuerdo incluyendo en la operación a Nelson Semedo, el lateral luso que gusta en el Wanda Metropolitano.

En el Atlético, mientras, ya le buscan recambio con Cavani y el joven portugués Joao Felix a la cabeza. «Tenemos que encontrar jugadores que no estén por encima del equipo. Hay que formar un grupo de hombres», dijo ayer Gil Marín en un claro dardo hacia la estrella francesa.

De este modo se cerraría por fin el fichaje de Antoine Griezmann con el Barcelona después de las grandes dudas que hubo la temporada pasada. El ariete francés se debatía entre el club azulgrana y el colchonero y, después de muchos días y semanas de idas y venidas, dio a conocer su decisión en un documental que dio mucho que hablar. Gerard Piqué, central del Barça, ya conocía el destino del que será su nuevo compañero debido a que la productora que hizo dicho documental es propiedad del defensa culé. Entonces decidió quedarse con una mejora de contrato, pero ahora pondrá rumbo al Barça.