Con semblante serio y voz rotunda, Porfirio Fisac mostró orgullo en su comparecencia en la sala de prensa para analizar un partido que su equipo estuvo a punto de vencer, aunque, en esta ocasión, no acertó en la última posesión. «Me da rabia y siento tristeza porque durante mucho tiempo he tenido la sensación de que estábamos haciendo el partido casi perfecto», expuso el segoviano.

Para Fisac, el duelo se resolvió en un «cara o cruz» aunque trató de que no fuera así a través de algunas decisiones en busca de una renta favorable. «Hemos tratado de sujetar con defensas diferentes para adquirir algo de ventaja, pero estamos hablando de un equipo que viene de conquistar la Eurocup y de ganar de forma holgada en los últimos partidos. Nos ha faltado algo de constancia al final», admitió.

Para el preparador, las dos técnicas que le abocaron a la descalificación no tuvieron especial trascendencia en el devenir final del encuentro. «Creo que no han sido detonante en el resultado final. Ya por entonces el partido estaba igualado y así ha seguido siendo hasta el final», expuso Fisac, que no quiso valorar la decisión de los colegiados. «No voy a realizar ningún comentario arbitral», subrayó.

Por su parte, el técnico del Vaelencia Basket, Jaume Ponsarnau, coincidió con su colega en que el partido había sido «un cara o cruz» y valoró el esfuerzo de su equipo ante un adversario «con jugadores puñal» con sus penetraciones. El Tecnyconta es, sin duda, el equipo que más canastones hace de toda la categoría», aseguró el entrenador.