El CAI Zaragoza es noveno en la clasificación y ya no depende de sí mismo para clasificarse para la Copa del Rey, pero aún conserva opciones. El primer paso, obligatorio, que debe dar el equipo de José Luis Abós es vencer al Murcia el próximo sábado en el Príncipe Felipe y, además, intentar hacerlo por la mayor diferencia posible porque la diferencia de puntos será clave. No obstante, el CAI necesita también que se den otros resultados y que pierda, al menos, uno de los tres equipos que le anteceden en la clasificación: Laboral Kutxa en Fuenlabrada, Tenerife ante Manresa o Gipuzkoa en casa del Estudiantes.

Si ganan los tres, el CAI solo podrá superar a los donostiarras y por el average, para lo que tendrán que recortar 41 puntos, ya que Gipuzkoa suma ahora +55 y los aragoneses +14. En caso de empate a triunfos con Laboral Kutxa y Tenerife, el CAI estará por delante, ya que ambos están en negativo, los vitorianos con -3 y los insulares con -19. Si mira hacia atrás, el conjunto zaragozano le saca 2 puntos al Joventut y 33 al Cajasol.

Sobre el encuentro de ayer, José Luis Abós valoró que la diferencia final era excesiva para los méritos de su equipo. "Tengo que felicitar a mi equipo porque ha sabido jugar un encuentro que se había puesto muy complicado con una entrada al campo muy mala por nuestra parte y con mucho acierto de Laboral Kutxa. Al final se ha decidido por pequeños detalles, por quién fue capaz de mantener la cabeza más fría", dijo Abós.