El grupo de empresarios aragoneses que lidera Mariano Casasnovas aseguró haber dado ayer por la tarde en una notaría de Madrid el penúltimo paso para hacerse con el control del club, para comprar más del 92% de las acciones de Agapito Iglesias, que en principio se quedaría con un 1%, las que tiene a título personal. Según confirmaron a este diario diversas fuentes de ese grupo, los 11 empresarios aragoneses se citaron en una céntrica notaría de Madrid, en la calle Claudio Coello en concreto, para firmar con Agapito Iglesias, que esta vez sí acudió a la cita, el documento de la transacción de las acciones. Eso sí, esta transacción estará pendiente de la autorización del juez Picazo, porque las acciones de Agapito en el Zaragoza están puestas como fianza en el caso Plaza y podrían quedar embargadas.
Esta firma finalmente se pospuso a esta mañana, a las 10.30 horas y en la misma notaría, por solo dos trámites. De un lado, la mayoría de esos 11 empresarios iba a firmar en ese documento como persona física, y por ahí no había ningún problema, pero unos pocos pensaban firmar su parte del aval a través de sociedades, lo que no se pudo hacer, aunque se confía en resolver esa cuestión hoy y que eso no suponga más contratiempos en el reparto del aval entre el grupo
Ese trámite sobre la forma de la firma y un documento de compromiso del fondo inversor, en este caso holandés, que tomará las riendas del club, fueron las causas que, según este grupo, retrasaron la rúbrica. En el mejor de los casos, en el más optimista, se espera que esta tarde ya se pueda hacer oficial la transacción de acciones y salir a la escena pública el viernes, también para anunciar el proyecto deportivo, mientras que otras fuentes del grupo hablan de rematar la operación esta semana.
FONDO INVERSOR El reparto del aval de hasta 8 millones --que exige Agapito para los pagos más inmediatos de la SAD-- en ese grupo, cuyas cantidades no serán proporcionales entre sus 11 miembros, ya quedó establecido el sábado. Por eso la firma quedó fijada para ayer. Esos 11 empresarios aragoneses, la mayoría de la construcción, pero algunos relacionados con la moda, la distribución o el mundo taurino, formarían parte del consejo de administración del club y uno de ellos sería el presidente, algo que ya está decidido. Mientras, Luis Gamón entraría como responsable financiero.
Con ese aval lo previsto es que el club no se paralice hasta la llegada de ese fondo inversor dentro de poco tiempo, unos meses como máximo, según se asegura entre estos empresarios. En todo caso, este fondo pondrá a personas de su confianza en el club, pero los 11 empresarios se mantendrán como consejeros.
La opción aglutinada por Casasnovas siempre ha sido la preferida por Agapito, que no cobraría ahora por esas acciones, aunque sí podría hacerlo en un futuro, sobre todo en caso de ascenso a Primera División, objetivo ineludible para la próxima temporada. De un lado, implica la permanencia de Cuartero y Checa, ahora consejeros y dos de los hombres de confianza del soriano, que, además, ha asegurado a sus íntimos que prefiere traspasar el club a empresarios aragoneses. O eso dicen estos. Pitarch, actual director general, no continuaría con este grupo, ni tampoco sus colaboradores.
SHEIKH La otra opción, la liderada por el empresario pakistaní Kadir Sheikh, pidió el lunes una reunión urgente con Agapito, cónclave que ayer no se produjo, si bien algunas fuentes cercanas a este empresario aseguran que dialogaron por teléfono. Esas mismas fuentes afirman que la propuesta se mantiene, pese a la informalidad que Agapito está teniendo con Sheikh, si bien el paso de las horas está dejando claro que la decisión del soriano está muy tomada. Sheikh, que estaría apoyado por un grupo de empresarios alemán, y que tendría en Javier Láinez a su presidente y a Nayim al director deportivo, ha dejado entrever su hartazgo en los últimos días.
