Rubén Falcón ha pasado de estar defenestrado a convertirse en el suplente del Real Zaragoza. El meta aragonés, de 27 años, pese a tener ficha con el primer equipo se entrenaba con el filial. "Por edad no podía jugar con el filial y subir luego, si hacía falta, por eso me mantuvieron la ficha con el A. Dada la situación preferí seguir trabajando con el B", dijo Rubén, que acaba contrato esta temporada. "Me duele que haya sido por la lesión de un compañero, pero para mí es una oportunidad", comenta Falcón, quien en enero parecía destinado a dejar el club. Su nueva situación se la comunicó ayer en una reunión Pedro Herrera, secretario técnico del Zaragoza.