Soriano está encontrando en la competición europea el mejor consuelo de la temporada. Hasta el momento, ha sido titular en los dos partidos que el Zaragoza ha jugado en la Copa de la UEFA, en la eliminatoria frente al Sigma Olomouc, en la que fue absolutamente decisivo en el choque de vuelta, y puede serlo también mañana frente al Utrecht, ya que parte con más opciones que Generelo para ser el cambio en el doble pivote que parece asegurado. "El entrenador está aprovechando los partidos entre semana para hacer rotaciones y, en ese sentido, sí aumentan las posibilidades", reconoce el centrocampista.
Hasta el momento, en los tres partidos disputados entre semana, ante el Sigma y frente el Barcelona en Liga, Víctor sentó en el banquillo a Zapater y situó como acompañante de Movilla a Soriano en Europa y a Generelo en el Camp Nou y todo apunta a que mañana ésa será también una de las posibles rotaciones.
DIFERENTE ROL Generelo y Soriano han asumido un papel secundario, que en el caso del centrocampista zaragozano supone una gran diferencia con respecto al inicio del curso pasado, donde tenía la titularidad indiscutible. "Ese rol no se lleva igual de bien que cuando eres titular, pero en cada plantilla sólo juegan once y ahora me toca a mí estar entre los que tienen que demostrar al entrenador que puede contar con ellos en cualquier momento", asegura, para admitir después que no es fácil mantener un nivel elevado cuando no se tiene la continuidad. "Cuando no juegas con asiduidad el ritmo no es igual y, si sales en los últimos minutos, hay veces que no logras coger el ritmo del choque, pero hay que acostumbrarse también a eso".
Pese a todo, Soriano asegura estar contento con su aportación en este arranque de curso. Y tiene razones para ello. Marcó el gol decisivo en Olomouc, que suponía el 2-1, y metía al Zaragoza de nuevo en Europa cuando estaba a punto de asomar por la puerta de salida y, en líneas generales, cumplió con nota en todos los minutos que lleva jugados --162 en la UEFA y 61 en la Liga--. "La temporada está saliendo más o menos como esperaba", explica.
En esa expectativa hay que situar una conversación con Víctor al final del curso pasado en la que el entrenador le dijo que iba a tener difícil hacerse con un hueco en el once. En esa lucha por tener esa plaza anda Soriano y, aunque de momento no la ha ganado, siempre tuvo en la constancia el principal valor para alcanzar las metas: "Es verdad que ahora tengo un papel más secundario que en mi primer año en la máxima categoría, pero hay que saber asimilarlo y desempeñar la labor lo mejor para el equipo. Tampoco quiero darle muchas vueltas. No sirve de nada", añade.
MINIMO MARGEN DE ERROR Lo inmediato es su posible titularidad mañana, en un debut en la Liguilla que tiene un sabor especial, como todos los partidos en Europa. "Al ser una competición en la que el margen de error es mínimo siempre resulta más atractivo para jugar", sentencia, para situar en la victoria el objetivo ineludible para el choque frente al Utrecht: "Es fundamental empezar bien, porque con cuatro partidos casi no hay tiempo de reacción si tropiezas".
Del Utrecht espera, como el resto de la plantilla, un rival duro, correoso, aunque "tienen gente de calidad y juegan bien al fútbol. Ser terceros en la Liga holandesa ya habla a las claras de eso". Sin embargo, no tiene dudas del triunfo zaragocista si se cumple el guión y éste pasa por la concentración absoluta para superar a un adversario que es en teoría inferior: "Si salimos mentalizados hacemos buenos partidos. Hay que tener la mayor humildad posible para no desconcentrarnos y no caer en esa relajación que nos puede pasar factura".
