El Huesca se reencontró con la victoria tras tres jornadas sin vencer en su propio terreno de juego. El Figueres se mostró en la capital oscense como el rival más flojo que ha pasado esta temporada por El Alcoraz, en un partido en el que los oscenses estuvieron a un buen nivel. Angel Chamarro dispondrá de una semana de mayor tranquilidad tras los últimos malos resultados en casa, donde no conseguía vencer ni convencer a su público.

En la primera mitad, el conjunto oscense salió muy replegado, y jugando con balones largos llegó con peligro en varias ocasiones a la portería defendida por José, aunque no fue capaz de batirlo.

En el minuto quince Curto tuvo una buena ocasión pero disparó a las manos del portero visitante, y cinco minutos después de nuevo Curto tuvo en sus botas la oportunidad de marcar por medio de un penalti que le detuvo José. Un minuto después fue Roberto el que no acertó con la portería del cuadro catalán.

Los ampurdaneses no inquietaron al guardameta local Bernardo, aunque llegaban con facilidad hasta la portería local, ya que se hicieron con el control del centro del campo ante la pasividad de los jugadores locales.

MARCA ROBERTO Tras el descanso, los azulgranas se adelantaron pronto en el marcador gracias a un balón que entregó el visitante Pintado a Roberto, que únicamente tuvo que empujar el balón al fondo de las mallas visitantes. El gol llevó a los locales a replegarse para tratar de conservar la ventaja ante un adversario que apenas les inquietó. En un contragolpe, los de Angel Chamarro sorprendieron a la defensa visitante por medio del goleador Roberto, con lo que dejaron prácticamente sentenciado el partido.

En una de las escasas ocasiones en la que los ampurdaneses llegaron al área local Jito vio cómo el colegiado le anuló un gol que podía haberles permitido acortar distancias.