Tiene por delante el Huesca una prueba de madurez considerable. El equipo altoaragonés recibe en casa este sábado al Extremadura (16.00 horas, Movistar LaLiga 1) con la obligación de ganar por su condición de favorito, por hacer valer su fortaleza en casa y por recibir a un equipo al alza pero que pelea por no descender a Segunda B. Eso sí, los azulgranas deberán reponerse anímicamente a los golpetazos recibidos en Vallecas por parte del Rayo, que logró dejarle sin puntuar, y de la actuación arbitral, que ha coleado durante los últimos días en el seno del conjunto oscense.

Los azulgranas siguen con la misma película de casi todo el curso. Es decir, arreglando en El Alcoraz lo que descuida lejos del calor del hogar. De momento se mantiene a flote, en una buena situación, aunque no privilegiada, por lo que no puede permitirse errores y menos en casa. El Cádiz mantiene un colchón de seis puntos con el equipo oscense, mientras que el Real Zaragoza ha adquirido una velocidad de crucero difícil de igualar. En definitiva, que la segunda plaza está a cinco puntos y el Huesca, para no descolgarse, necesita vencer.

Al menos cuenta con la seguridad de El Alcoraz, feudo prácticamente inexpugnable, lugar donde pondera al alza todas y cada una de sus virtudes. El último duelo casero frente al Almería evidenció que el Huesca, como local, es un equipo temible y aspirante a todo, aunque esa versión, a veces, le cuesta sacarla si el adversario no es uno de los gallitos de la competición.

Recado de Míchel

Otra de las incógnitas será ver el clima de El Alcoraz y sus aficionados con los colegiados después de la actuación vivida en Vallecas y el enfado mostrado públicamente por todos los estamentos del club y, a su vez, comprobar si el equipo azulgrana se olvida de todo ello durante el duelo o si le afecta.

El Extremadura es un rival más peligroso de lo que indica la clasificación y, en Almendralejo, ya mereció sumar, aunque el gato al agua se lo llevó el Huesca. Los visitantes llegan con bajas importantes como Kike Márquez, Olabe o Zarfino, pero con la moral alta tras la victoria en los instantes finales frente al Mirandés. Al menos recupera Mosquera para el medio del campo a Lomotey tras cumplir un partido de sanción.

Por su parte, el conjunto azulgrana solo tiene la ausencia de Doukouré, que continúa con su puesta a punto, y de Javi Galán, sancionado por acumulación de cartulinas amarillas. Las principales dudas de Míchel están en el lateral derecho, con Pedro López y Miguelón como alternativas, y en la delantera. Okazaki ha jugado los dos últimos encuentros, pero podría regresar a la alineación inicial Rafa Mir.

Míchel, técnico azulgrana, aseguró en la previa del encuentro que «hay que olvidarse del pasado», del choque frente al Rayo Vallecano, pero también dio un mensaje claro, conciso y directo sobre la situación clasificatoria del Huesca: «Para ser un equipo que luche por los dos puestos más importantes tenemos que modificar cosas en cuanto a derrotas, porque evidentemente no tenemos números de conseguir el ascenso directo a día de hoy», dijo el técnico del equipo azulgrana.

Además, el madrileño no se fía del Extremadura: «Es un conjunto que intenta robarte rápido, porque tiene gente muy rápida. Es un partido de máxima dificultad, pero confiamos en nuestro trabajo. Tenemos que ser agresivos, dominadores y saber sufrir desde la humildad, porque sin ella no conseguiremos nada. Podemos ganar cualquier partido con mucho trabajo y esfuerzo», subrayó Míchel.

Alineaciones probables:

Huesca: Álvaro Fernández, Miguelón, Josué Sá, Pulido, Luisinho, Mosquera, Mikel Rico, Juan Carlos, Dani Raba, Ferreiro y Rafa Mir.

Extremadura: Casto, Ale Díez, Fran Cruz, Borja Granero, Bastos, Lomotey, Cristian, Nono, Pinchi, Pastrana y Álex Alegría.

Árbitro: Sagués Oscoz (Comité Vasco).