Huesca se llevó el tercer campeonato de selecciones provinciales en su categoría sub-16 al vencer por la mínima a sus dos rivales. Huesca basó su triunfo en la regularidad de sus jugadores, mostró el bloque más compacto y fue quien tuvo las ideas más claras. Zaragoza fue demasiado irregular, fue capaz de realizar los mejores minutos de juego ante Teruel, pero acabó perdiendo fruto de sus propios errores. Teruel, durante muchos minutos, pareció un juguete roto en manos de Zaragoza, y parecía condenado al ostracismo, pero dos goles de Castán le dieron la vuelta al resultado y estuvo muy cerca de lograr el triunfo.

En el primer encuentro, Huesca se adelantó muy pronto en el marcador, al aprovechar Naya un despiste en el centro de la zaga zaragozana y marcar mandando el balón por encima del portero, que se encontraba a media salida. Zaragoza trató de reaccionar, pero sus ocasiones fueron escasas y muy poco claras. Conforme fue pasando el tiempo Huesca se deshizo del leve dominio y tuvo las mejores ocasiones para marcar.

Ante Teruel, Zaragoza se mostró superior durante dos tercios del enfrentamiento, moviendo muy bien el balón y creando varias ocasiones de gol, de las que sólo logro transformar una. Teruel no reaccionó, y Zaragoza siguió llevando el peso del choque, estando cerca de ampliar su ventaja. Pero un error en el despeje con el pie del guardameta de Zaragoza le puso el gol en bandeja a Castán, que cuatro minutos después aprovechó otro fallo del portero para, de forma inverosímil, darle la vuelta al resultado.

EL CHOQUE DECISIVO A Teruel le valía el empate a cero para llevarse a casa el triangular, pero salió con descaro al ataque. Huesca, al igual que ante Zaragoza fue de menos a más, y tras un disparo de Naya al palo buscó con ganas el gol de la victoria. A falta de seis minutos obtuvo su recompensa, al aprovechar Pérez un rechace el portero turolense.