Sin Novak Djokovic, Rafael Nadal, ni Roger Federer en la pista, el Masters 1.000 de Miami era la ocasión para que Daniil Medvedev. Alexander Zverev y Stefanos Tistisipas, el big three? del futuro, aprovechara para llevarse el título, pero ninguno de ellos lo ha logrado. El premio se lo ha llevado el polaco Hubert Hurkacz, 24 años y número 37 mundial, que se ha convertido en el inesperado campeón al vencer en la final al italiano Jannik Sinner por 7-6 (7-4) y 6-4 que, con 19 años, también disputaba su primera final en un Masters 1.000.

Hurkacz se ha convertido en el primer tenista polaco que conquista un título de esta categoría desde su creación en 1990 y con su victoria en Miami suma 10 partidos sin perder después de ganar hace unas semanas el título en Delray Beach, en un palmarés que estrenó en Winstom-Salem en 2019.

Esta victoria me da mucha más confianza en mí mismo. Quiero ser tan bueno como pueda y estoy trabajando para conseguirlo, recalcaba Hurkacz tras conquistar el título y sumar mil puntos para saltar al puesto 16 mundial en el ranking de la ATP.

Iga Swiatek, su inspiración

El tenista polaco asegura que ha cambiado su mentalidad y la confianza desde que vio ganar a su compatriota Iga Swiatek en Roland Garros, el pasado octubre. Lo que Iga hizo en París fue increíble. Su triunfo me dio confianza e inspiración para creer que yo también podía ganar grandes títulos, decía con orgullo tras ganar la final en Miami.

Una victoria conseguida después de dejar en el camino a la final a los canadienses Dennis Shapovalov (7-6, 6-3) y Milos Raonic (4-6, 6-3, 7-6), al griego Stefanos Tsitsipas, (2-6, 6-3, 6-4) y al ruso Andrey Rublev (6-3, 6-4).

Hurkacz es con tres títulos el tenista polaco que más torneos ha ganado después de su compatriota Wojciek Fibak que logró 15 y llegó a ser número 10 mundial, tras alcanzar la final del Masters en 1976 que perdió ante Manuel Orantes en Houston.

Toda Polonia está viviendo su aventura como con Iga. Ellos dos son nuestro orgullo. Hubert lo tiene todo para llegar muy lejos. Su tenis es imaginativo, valiente en la red y muy preciso con todos sus golpes, ha destacado Fibak en unas declaraciones en la web de la ATP.

Antes de Hurkacz, el único tenista polaco en jugar una final de Maters 1.000 había sido Jerzy Janowicz en París en 2012 que la perdió ante David Ferrer. Janowicz, ahora de 30 años. llegó a estar el número 14 mundial, pero una serie de lesiones y varias operaciones en la rodilla rompieron su progresión hasta caer al puesto 512 que ocupa en la actualidad.