El imponente triunfo del pasado sábado en Oviedo puso la guinda al mejor comienzo de temporada del Real Zaragoza en los últimos 20 años, una goleada que ha disparado las expectativas generando un tanto de euforia en el entorno al tiempo que ha constatado que el equipo ha tomado el camino correcto. Aun así, hay calma. «No podemos pararnos a valorar nada al mes de competición. Estamos satisfechos del trabajo y de las sensaciones que está transmitiendo el equipo, pero no podemos recrearnos ni un segundo en lo que hemos hecho. Mañana (por hoy) hay un partido y el domingo otro, esto no para. Estamos contentos, sobre todo porque la actitud que vemos es la que queremos y hay ciertos comportamientos que nos transmiten seguridad», dijo Idiakez, que admitió la alegría al tiempo que frenaba el entusiasmo.

Tampoco vaciló el técnico a la hora de hablar del partido de esta noche y la manera de afrontarlo. «Que no tenga nadie ninguna duda de que vamos a salir a ganar. Jugamos en La Romareda y con el escudo del Real Zaragoza, eso no se discute», manifestó Idiakez, que se confesó al máximo en cuanto a ambición: «Más ganas de ganar que el 100% no existen, y esas son las que tengo yo cada día. Estamos en el máximo siempre porque cada vez que nos ponemos la camiseta del Real Zaragoza queremos ganar».

Se trata de conjugar alegría y prudencia, de conocer las virtudes y aplicarlas. «Pese a ser un vestuario joven, es maduro. El equipo ya traía buenas sensaciones desde el principio aunque no hubiéramos tenido un resultado tan espectacular como el del sábado, pero todo el mundo sabe que esto cambia muy rápido y nadie va a sacar pecho. Es un vestuario sabio que ya ha vivido un año de altibajos que ha hecho madurar a la gente. Somos conscientes de que estamos en el inicio, pero también sabemos el potencial que tenemos. Eso refuerza la confianza y la creencia en lo que estamos haciendo».

Se supone al Deportivo como uno de los principales rivales de la temporada, un conjunto fuerte. «Me preocupa que mi equipo esté bien, es lo que me ocupa. Estamos en un buen momento, aunque evidentemente estudiamos el rival e intentaremos explotar sus debilidades. Lo que nos preocupa es estar en nuestro nivel más alto de rendimiento. Sabemos de la fortaleza del rival, del presupusto que manejan y el tipo de jugador que han firmado, pero nosotros nos centramos en nuestras fortalezas y vamos a intentar rendir al máximo nivel para sacar la eliminatoria».

Idiakez habló también de la nueva figura geométrica del Zaragoza. Una vez desaparecido el rombo, el equipo parte de un 4-3-3. Para el técnico, no obstante, no hay números ni formas sino puntos de partida. «No creo en los sistemas, creo en los futbolistas. Lo más importante es que los futbolistas crean en lo que hacen y que interpreten el partido en función de lo que está pasando. Hay que interpretar dónde están los espacios o qué posiciones nos van a dar ventajas durante el juego. Lo están haciendo muy bien. Es una gran noticia que el equipo tenga ganas de dar un paso adelante y en el desarrollo. Al final, los sistemas son puntos de partida. Son los jugadores los que hacen que el sistema sea uno u otro».

Por último, Idiakez defendió a Marc Gual y se mostró convencido de que hará muchos goles porque «ha hecho muchas situaciones para marcar» y espera ver esta noche un buen partido: «Nos medimos dos buenos equipos, en un gran escenario, una competicion atractiva... El Dépor ha empezado bien el campeonato y nosotros también tenemos buenas sensaciones. Esperamos un buen partido de fútbol, en principio igualado y de dificultad», concluyó el preparador vasco.